"Si no nos reímos del mundo; el mundo se ríe de nosotros"

El primer demo de "Asspera" estaba destinado, como el resto de su carrera, a incomodar y generar sorpresa, como mínimo. En una versión bien metalera, el grupo presentó hace más de 20 años un cover de “Violeta”, el tema que Alcides hizo conocido en todo el país. Fue una de las primeras vinculaciones no consabidas del conjunto de metal bizarro con San Luis.

Por eso es difícil explicar las razones por las que la agrupación no haya tocado nunca en la provincia, una deuda que se saldará el viernes en Comuna, producción de JF producciones. “Nos han llegado muchos mensajes preguntando ‘¿Cuándo mierda van a venir a San Luis?’, ‘¿Cuándo carajo van a estar por esta parte del país, hijos de putas?’, “Eh...la concha de su madre vengan a San Luis!’”, dijo, con su habitual flexibilización del lenguaje, Richard Asspero, uno de los fundadores del grupo.

Basta hacer un repaso por los nombres de los discos y los temas del grupo para conocer el nivel de escatología de “Asspera”, una banda única en su tipo que mezcla humor en canciones pesadísimas, covers altamente divertidos y una participación icónica en la publicidad de Marolio y en la fugaz carrera metalera de Cristian Castro, quien grabó con la banda una versión heavy de “Lloviendo estrellas”.

El show en San Luis estará basado en el nuevo disco, de título impublicable, y sucesor de un álbum grabado en pandemia, durante un panorama “semiapocalíptico, rodeado de peste, políticas de mierda, encierro y muerte”, destacó el cantante.

Cuatro años después el grupo regresó a las plataformas con una propuesta diferente, producto de otras vivencias y formas “quizás más serias” de contar lo que sucede en el país. “Hacemos una fuerte y más directa critica a un montón de realidades que afectan a nuestra sociedad”, agregó Richard, quien remarcó que la herramienta principal que usan es el humor. Que la gente haya aceptado el disco con la rapidez que lo hizo es para “Asspera” “casi tan importante como el penal de Montiel o la atajada del Dibu Martinez”.

La permanecia del grupo durante más de dos décadas tiene algunos sostenes que los integrantes se encargan de enumerar: “Primero, tenés que estar completamente enfermo. Segundo, no escuchar consejos”.

Para “Asspera”, el metal bizarro no es un género, sino un estilo de vida “que huele a choripán y transpiración post pogo” y, para continuar con la cuestión aromática, el cantante dijo que lo mantienen con “dignidad y olor a ojete”. Puesto a hablar en serio, Richard asegura que no hay bandas que hagan lo que ellos hacen y justamente por eso llegar hasta donde llegaron fue fácil por un lado y "ultra difícil" por el otro.

Las versiones metaleras que hicieron de “Ahora te puedes marchar”, “La pachanga”, “Don”, “El estudiante” y “Locomia” fueron un impacto que quedaron amuchados en “Glandes éxitos”, un disco de covers. En el álbum más reciente hay un mix de “Aserejé” y “Pedro”, el clásico de Rafaella Carrá, con la participación de la enorme Tarja Turunen, ícono femenino del metal nacional.

“Elegimos temas que nos destruyan el alma y nos den vergüenza ajena. Si es un clásico, lo cagamos”, explicó el metalero, quien recordó que una vez quisieran hacer “Thriller”, de Michael Jackson, “pero no nos salía el paso del zombie”. Después de Aserejé, bromeó Richard, puede venir el silencio, la oscuridad o algún tema de Lali, Dillom, Ghost o BabyMetal.

Acostumbrados a batallar contra el sistema, pero también contra el “algoritmo y contra nosotros mismos”, “Asspera” tiene en claro que el camino es la pasión, el amor y la constancia pero por sobre todas las cosas las risas. “Nada vence al humor, porque si no nos reímos del mundo, el mundo se caga de risa de nosotros”.