Los dos primeros pasos, los más importantes

En un momento de crisis en la gestión cultural tanto a nivel nacional como provincial, un grupo de artistas de San Francisco del Monte de Oro apuesta por desarrollar un proyecto con injerencia artística, pero también social. El primer paso fue transformar lo que era una productora de espectáculos, “Gramilla”, en una fundación.

De esa manera, los encargados podrán generar acciones de fomento a las expresiones artísticas, ser parte de convocatorias a nivel nacional y, por supuesto, realizar ciclos y espectáculos para la población de la localidad y lugares vecinos. En ese sentido, el sábado comienza “Alegrato”, una seguilla de funciones para los más chicos que tendrá frecuencia mensual.

La primera presentación será del grupo “Titiricuentos”, de Villa Mercedes, que llevará a la sala Clara Chuntún del Centro Cultural de San Francisco su obra “Mosquipiojo”, una pieza creada por Antonio Escudero que se verá a las 19:30 y tiene la intención de enviar un mensaje sobre lo importante de la higiene en los chicos. El 14 del mes que viene. “Chemiguitos”, de Merlo, llevará su clásico “Relatos revueltos” y en julio los mendocinos de “Haraviscus Gárgolas” llegarán a la localidad.

La fundación “Gramilla” ocupará el espacio que hasta ahora poco tenía el “Colectivo cultural San Francisco del Monte de Oro”, una agrupación que durante 12 años gestionó con mucho esfuerzo y dedicación Susana Andrián, una maestra titiritera que al jubilarse había decidido cerrar la sala.

En Colectivo Cultural se desarrollaban talleres, funciones de teatro, conversatorios, lecturas en su biblioteca y una gran cantidad de actividades culturales. Algunos trabajadores del lugar, entre los que se destacan la inquieta actriz brasileña Thais Folk, solicitaron el permiso de Susana para continuar su labor.

“Ella nos donó muchas cosas que vamos a usar en la fundación. Yo trabajé tres años en el Colectivo cultural como tesorera y es un espacio que debemos mantener”, dijo la artista, ahora miembro de “Gramilla”, quien dijo estar muy contenta por el fuerte aval con el que inicia la fundación. 

Las entradas para “Alegrato” cuestan 2 mil pesos y si se compran dos, el precio se rebaja a 1.600 cada una. “Una de las consignas con las que trabajamos es ofrecer espectáculos a precios populares”, dijo Thais, quien además encabezó en la semana una tarea de promoción por las escuelas de la localidad con actividades especiales para los alumnos.