Detuvieron a un matrimonio por una nueva agresión a policías

Con la conmoción por el ataque al oficial ayudante Diego Gatica aún latente, volvió a ocurrir otro caso de agresión a policías. En la tarde del viernes, un efectivo de la Policía Ciudadana terminó con cortes y golpes en el rostro y la cabeza, y su compañero con hematomas en todo el cuerpo tras ser agredidos por dos adolescentes y los padres de uno de ellos. Este sábado al mediodía, efectivos de la Comisaría 2ª y de la Unidad Regional de Orden Público 1 (UROP 1) detuvieron a una pareja y secuestraron su auto en una vivienda de Presidente Raúl Alfonsín casi llegando a Catamarca.

 

La secuencia del hecho comenzó el viernes cerca de las 16:30, cuando un peatón les advirtió a los oficiales ayudantes Héctor Llubel Jolivot y Lucas Alcaraz que un grupo de jóvenes cruzaba de forma imprudente la avenida Eva Perón, a la altura del Puente Blanco. Cuando fueron a investigar, la mayor parte de los chicos se dispersó y solo quedaron tres, que se negaron a ser identificados, informó el comisario Rubén Ochoa, jefe de la Comisaría 2ª.

 

 

Sanduay. Arengó el ataque y lo filmó con su teléfono, que fue secuestrado. Foto: Héctor Portela.

 

 

Los adolescentes se marcharon y los agentes se quedaron de guardia en la plazoleta que hay en calles Callao y Catamarca. Cerca de las 18, un Citroën C3 gris frenó junto a ellos y un hombre y dos chicos se bajaron a increparlos. “La persona mayor les recriminó que le hayan pedido los datos a su hijo y comenzaron a golpearlos entre los tres sin mediar palabras”, contó Ochoa. En principio los atacaron a puñetazos, pero en un momento alguno tomó un objeto, creen que una piedra, e hirieron a Llubel Jolivot en la parte izquierda del rostro.

 

El oficial ayudante fue trasladado a la Clínica Italia, donde debieron hacerle dos puntos de sutura en la ceja. También acusó una descompensación y mareos por la contusión en el cráneo. A Alcaraz lo patearon en el piso y le provocaron hematomas en la espalda y la parte delantera del tórax.

 

 

Llubel Jolivot. Le dieron el alta. Foto: Gentileza.

 

 

Una cámara de seguridad pública captó la agresión a los sospechosos y al vehículo. Eso, sumado a la declaración de varios testigos y a la denuncia de las víctimas, fue suficiente para que el fiscal de Instrucción 1, Emmanuel Sastre, autorizara un allanamiento en una vivienda de avenida Presidente Raúl Alfonsín, casi en la esquina con Catamarca, a menos de 500 metros de donde ocurrió la agresión.

 

“La finalidad fue ingresar e inspeccionar en busca de varios elementos que obraban como de interés para la causa. Se procedió al secuestro de prendas de vestir, telefonía celular y del rodado que utilizaron para cometer el ilícito. También se procedió a la detención de dos personas partícipes del hecho”, detalló el comisario José Marín, jefe de la oficina Judiciales de la UROP 1.

 

Los sospechosos son un matrimonio: él es de apellido Garro y tiene 48 años, y ella es de apellido Sanduay, de 43, quien no agredió físicamente a los agentes, pero sí arengó a su familia al ataque y lo filmó. Su hijo de 17 años, señalado como otro de los partícipes, está sujeto a la investigación, pero no ordenaron su demora.

 

Los acusan por “Lesiones, amenazas, atentado y resistencia a la autoridad agravada”, confió Ochoa. Hasta tanto sean conducidos a la audiencia de formulación de cargos, los investigadores están tras el tercer joven implicado.