Absolvieron a un acusado de abusar sexualmente de su hija menor

Luego de dos meses de debate oral, finalmente sucedió lo que la defensa de M. esperaba en vista de las pruebas presentadas en el juicio. Es decir, el tribunal de Villa Mercedes que juzgó al hombre, acusado de abusar nada menos que a su propia hija, lo absolvió por tal acusación.

El tribunal, conformado por los jueces Daniela Estrada, Virna Eguinoa y Sebastián Cadelago Filippi, lo absolvió por el beneficio de la duda. La decisión de los magistrados no fue unánime. Eguinoa y Cadelago Filippi votaron en favor de la absolución y Estrada, en cambio, entendió que el acusado debía ser condenado a tres años de cárcel.

Los fundamentos del veredicto serán dados a conocer en los siguientes diez días hábiles. No obstante, el hecho de que el tribunal haya votado en su mayoría por el beneficio de la duda significa que los elementos probatorios y las declaraciones expuestas durante el juicio no llegaron al nivel de certeza necesario para demostrar que existió el delito contra la integridad sexual.

Un par de horas antes de que los magistrados dieran a conocer su fallo, las partes hicieron sus alegatos. El fiscal Ernesto Lutens solicitó que el acusado sea condenado a cuatro años de prisión por "Abuso sexual simple agravado por ser en perjuicio de un ascendiente".

El defensor oficial Víctor Endeiza, representante del imputado, solicitó, por el contrario, que sea absuelto.

M. fue denunciado en 2015 por la madre de su hija, con quien había tenido una breve relación. Según su denuncia, los ultrajes habían sucedido el año anterior, cuando la criatura tenía apenas cuatro años e iba a su casa, durante el régimen de visitas.

El defensor recordó que, a los pocos meses de realizada la denuncia, la nena fue sometida a una Cámara Gesell. Pero como lo que resultó en esa entrevista no fue nada claro para establecer si existió un abuso sexual y de parte de quién, dos años después la chiquita fue sometida a una segunda audiencia. De hecho, el mismo acusado había pedido que hubiera otra Cámara Gesell.

En esa segunda entrevista la pequeña dijo, en un momento y muy inhibida: "Papá me tocó acá".

Endeiza relató que la criatura nació producto de una "relación casual" que su defendido tuvo con la denunciante. "La mujer quería tener una relación con él, pero él no quería. Entonces, para que no se confundieran las cosas, pidió el régimen de visitas", explicó.

Redacción/ALG