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Podría quedar cuadripléjico un hombre atacado a puñaladas

Sergio Arias, el agresor, fue procesado por intentar matar a su hermano. Le dictaron preventiva por 2 meses.

Por redacción
| 13 de febrero de 2023
Arias llegó este lunes a Tribunales en silla de ruedas, acusando dolor por las lesiones que sufrió cuando lo redujeron. Foto: Martín Gómez.

Este lunes, mientras Edgar Arias permanecía internado en la terapia intensiva del Hospital Central “Ramón Carrillo” con altas probabilidades de quedar cuadripléjico, su hermano Sergio era procesado con 60 días de prisión preventiva por intentar matarlo a puñaladas. El fiscal de Instrucción 3, Esteban Roche, le imputó el delito de “Homicidio simple en grado de tentativa” y le pidió al juez que encarcele al hombre, quien tiene 50 años.

 

Roche le explicó a El Diario que si bien solicitó que la prisión preventiva fuera por 120 días, la defensora oficial Nadia Agúndez, quien representó al acusado, consideró que era un plazo excesivo. Finalmente, el juez de Garantías 4, Marcelo Bustamante Marone, le impuso la mitad. Durante ese tiempo, el Ministerio Público Fiscal deberá culminar la pesquisa para elevar la causa a juicio oral o, en caso de vencer el plazo y no haber concluido la investigación, podría pedir una prórroga.

 

“Entendemos que el riesgo procesal es mucho, que hay riesgo de entorpecimiento porque tenemos que ver si la víctima en algún momento va a estar en condiciones de declarar, y no es lo mismo hacerlo sabiendo que la persona que intentó matarte está en libertad o está presa. También consideramos peligro de entorpecimiento porque la mayoría de los vecinos, quienes son testigos, viven cerca y los conocen a los dos”, expresó el funcionario judicial.

 

 

El fiscal dijo que la carátula de la causa podría agravarse según la evolución de la víctima.

 

Si bien durante la audiencia el ahora procesado optó por abstenerse y no contar ningún detalle de lo que ocurrió, el fiscal relató que, según han podido reconstruir a través del testimonio de los vecinos de los hermanos, el ataque sucedió el sábado al mediodía en medio de una discusión que ambos mantuvieron en una vivienda de la manzana 246 del barrio Cerro de la Cruz, en la que viven solos.

 

Refirió que Edgar, quien tiene 47 años, recibió al menos cuatro puñaladas a la altura del cuello y en la espalda, y que fueron provocadas con un cuchillo de aproximadamente 20 centímetros de largo. Una de las heridas en la espalda le generó una lesión en la médula espinal y Roche comentó que “muy posiblemente lo deje en estado de cuadriplejia”.

 

Los testigos mencionaron que escucharon a la víctima pedir auxilio y que cuando llegaron a la vivienda hallaron al menor de los Arias desangrándose. Antes de desvanecerse alcanzó a advertirles que quien lo había herido era Sergio, quien aún permanecía en la casa. En ese momento, el agresor, quien todavía empuñaba el cuchillo, intentó escapar pero los vecinos lo redujeron hasta que llegó la Policía.

 

Durante la sujeción, el grupo le generó algunas lesiones leves al atacante, quien este lunes acusó dolores en la espalda y tuvo que ser conducido hacia la Sala de Oralidad 1, donde se desarrolló la audiencia de formulación de cargos, en una silla de ruedas. Y no mentía, porque en los Tribunales pudieron apreciarse grandes hematomas en algunos tramos de sus brazos.

 

Además del testimonio de los vecinos, el Ministerio Público Fiscal cuenta con el secuestro del cuchillo y de las prendas de vestir que la víctima vestía al momento de la agresión. También, vistas fotográficas que la Policía Científica tomó en el domicilio de los Arias.

 

El subcomisario Diego Payero, jefe de la Comisaría 39ª, que lleva adelante las actuaciones del caso, indicó que el atacante no posee antecedentes.

 

Tras su detención, el hombre fue trasladado al Hospital Escuela de Salud Mental para determinar su estado de lucidez. Roche explicó que no es paciente de ese centro médico y que, por ende, los profesionales no lo reconocieron. “Uno de los médicos que lo entrevistó refirió que estaba orientado en tiempo y espacio, y que incluso mantuvo una muy breve charla con él, en la que mostró signos de arrepentimiento y de culpa por lo que había ocurrido”, contó. Ese dato, al menos en principio, descartaría alguna patología psiquiátrica.

 

Por último, el fiscal comentó que aguardan la recuperación de la víctima para poder tomarle testimonio y resaltó que la imputación puede agravarse en caso de que empeore su estado de salud.

 

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