Yoselin "La Guerrera" Poma, una joven boxeadora impulsada por sus sueños

Como buena sagitariana, Eugenia Yoselin “la guerrera” Poma, es inquieta, altruista y triunfadora. La boxeadora tiene una meta definida: obtener el título de campeona argentina o sudamericana. Perseguir este sueño requiere mucho de ella, lleva seis peleas invicta y cuenta con lo más valioso para lograrlo, el apoyo de todos sus seres queridos. “Mi próxima meta es conseguir el título argentino o el sudamericano. Eso lo maneja mi promotor, Mario Arano. Me gustaría más el argentino, pero si se da el sudamericano, también es importante. Las peleas serán entre agosto, septiembre y octubre, en unas semanas se confirmarían”, explicó la joven de 25 años. 

La vida de Yoselin se apoya en dos pilares, sus hijos Britany de 7 años y Tadeo de 3. Combina la maternidad con los entrenamientos y lleva una vida bastante agitada. “Las mamás somos todo terreno. Las mujeres vamos cambiando con el paso de los años, vivimos sin prejuicios, estamos más abiertas mentalmente, somos más independientes y está bueno que sea así”, expresó la deportista y agregó: “Hay muchas mamás solteras que a veces se bajonean, pero tienen que salir, se puede con todo. Cuando tenía 17 años y quedé embarazada de mi primera hija el padre se borró; era muy chica, siempre pensaba que no iba a poder. Tuve el apoyo de mi mamá Zulma antes y ahora. Vivo con ella, su pareja, mis hermanos Dylan de 18, Madeline de 13 y Bruno de 12; y mis hijos”.

Escucharla hablar es agradable. Tiene una mirada cálida y buen humor, sobre todo se nota que no puede vivir sin sus seres queridos. “Tenemos una relación muy estrecha todos. A mi padrastro le decimos 'Pato', pero se llama Simón. Mi padre vive en España y también me apoya desde allá. Cuento con Mauricio, que es el papá de mi hijo, era mi pareja y estuvimos siete años juntos. Son una red de contención impresionante”, aseguró.

En cuanto a lo deportivo también encontró una red importante, lleva una dieta estricta que es controlada por la nutricionista, Johana Olguín; su médico es Fernando Vasconi. “Mi entrenador es Sergio Medina, mi preparador físico es Andrés Villarroel, que desde Buenos Aires manda los lineamientos que tengo que seguir y está todo el tiempo pendiente. Lo conocí personalmente en la última pelea. Se tuvo que hacer un ‘viajazo’ para ir con nosotros a Córdoba”, contó la joven. Y añadió: “Estoy súper agradecida con ellos y con Jorge en el Campus de Alto Rendimiento de La Punta que después de tener a mi hijo me abrió las puertas para entrenar, me aconseja, hacemos las actividades que manda mi preparador”.

Para las amigas no hay tiempo. “El deporte y la maternidad me llevaron a enfocarme en eso. Desde antes de que me hiciera profesional no salía a bailar, no tomaba una gota de alcohol, nunca fumé. Es que no tengo tiempo. Tengo que entrenar. Dejé muchas cosas de lado, pero me llena de satisfacción ver hasta dónde he llegado”, aseveró Yoselin, que no borra la sonrisa de la cara al recordar que sí considera a Micaela Luján como su única amiga. “Es campeona del mundo y vive en Villa Mercedes. Sé que siempre cuento con ella. La conocí en el ámbito amateur, en realidad nos querían hacer pelear a las dos, pero nosotras nos prometimos que nunca vamos a pelear. Somos de la misma categoría pero tenemos una amistad hermosa, de ella sí puedo decir que es una gran amiga. Tengo conocidas, pero en el ámbito deportivo la única amistad es ella”, afirmó.

Sus días transcurren con una rutina muy estricta, entrena dos horas diarias: “Llego cansada pero disfruto de llevar y traer a los chicos a la escuela. Mi atención está en poder darles una casa a ellos algún día, es lo que más me importa. Quiero tener un gimnasio deportivo, aunque primero está conseguir un título argentino o sudamericano. Voy a ir por uno ahora en los próximos meses y después voy por el otro sin duda. Seguro que lo vamos a lograr, pero todo lleva su tiempo, sacrificio y mucho trabajo”.

Al hablar de otras chicas que hacen boxeo se le iluminó la cara, “San Luis tiene que sumar experiencia, tenemos muy buenas boxeadoras. Con respecto a esto, el trabajo mental es muy importante. Ahora que estuvimos a pleno con la Copa América, se pudo apreciar el trabajo que hace el ‘Dibu’, es genial. Es el mejor, él se la cree, hay que creérsela. Es fundamental creer en vos misma. Se los digo hasta a mis rivales antes de pelear. Es importante entender esto. Me cuentan que están bajoneadas y yo les digo que así no tengamos un buen récord o no seas la mejor, tenés que creértela, creétela hermana, si no te la creés, nadie va a creer en vos, a mí me pasa eso. Siempre que voy a pelear sé que voy a ganar. Y quizás no gane, pero voy con la mentalidad de que lo voy a lograr. No me importa qué digan los demás. Muchos te tiran abajo cuando ven que vas creciendo, es como que les molesta, pero no me dejo vencer”. 

Considera que en San Luis se ha avanzado al nivel profesional: "Está Luz Córdoba, que es mi compañera, ella tiene tres peleas; tenemos a Tamara Gatica, y Soledad Frías, Leila Robledo y mi gran amiga Micaela Luján. Sería ideal que hubiera más compañerismo, para que el boxeo pueda crecer. Estuve en Córdoba para poder tener guanteo, que es fundamental para la pelea, y le esquivan a eso. Luz es la única que me ayuda a guantear. Con varones guanteaba pero ya no, porque esto me lo hizo un chico (señala una cicatriz en su nariz), fue sin querer, él se quería morir cuando me vio. Pero me empezó a dar miedo”, dijo Yoselin mientras se señalaba el rostro. 

“¿Sabés qué me da fuerza?”, preguntó Yoselin, y respondió enseguida: “Mis hijos”. Y continuó: “Ellos me abrieron muchísimo la mente, saber que están ahí, que te esperan con un beso y un abrazo. Siento que crecí mucho, que maduré en ese sentido. Antes tal vez me decían algo y yo contestaba. Ahora no me interesa. Sé lo que hago todos los días, sé cómo entreno, sé lo que estoy haciendo y por eso creo en mí. A veces me deprimo porque es difícil conseguir los recursos, me da ansiedad, empiezo a comer, sé que es normal porque soy un ser humano. Pero cuando me pasa intento motivarme sola. Me digo por algo estoy acá, me pongo a ver mis peleas y me emociono sola, después me corrijo y digo bueno, listo a entrenar”. 

Yoselin firmó contrato con la empresa Arano Box, que transmite las peleas por TNT Sport e ESPN. Fenix Salta es quien le realiza la ropa con la que la joven sale al ring y Agustinatrenzas, la peina. Cuenta con el apoyo de Lubrifiel, cuyo dueño es Alberto Quiroga. 

“El 22 de junio fue mi última pelea en Villa Carlos Paz, ante Florencia Cuello, de Córdoba. Pero me encantaría pelear acá en San Luis, cumplí el sueño de poder debutar acá, fue lo mejor que me pasó. Después hice dos peleas en Villa Mercedes y las demás fueron en Buenos Aires y Córdoba. Estoy esperando que me salga una pelea porque quiero que esté mi familia, mis más allegados, gente del gimnasio que fui conociendo, es un sueño, es lo mejor pelear acá”, aseguró.