Acindar continúa sin un arreglo de paritarias
Si bien durante abril no habrá suspensiones porque hay producción, el resto de los meses deberán evaluarlo.
Continúa el conflicto salarial en las plantas de Acindar en Villa Mercedes. La Unión Obrera Metalúrgica (UOM), sindicato que representa a los trabajadores de esa empresa, asegura que si bien en el mes de abril no habrá suspensiones, aún no lograron llegar a un acuerdo de paritarias con la patronal. La semana que viene tendrán una nueva audiencia de negociación.
“Ante semejante crisis, por suerte aún no ha habido despidos de personal efectivo. Hemos tratado de manejar la situación con vacaciones para los trabajadores a quienes se les adeudaba y también implementando un sistema de rotaciones en las diferentes plantas para evitar las suspensiones”, expresó Víctor Gómez, secretario general del gremio en Villa Mercedes.
Asimismo, remarcó que durante este mes tendrán carga de planta, es decir que estarán con actividad y producción, y no serán necesarias las suspensiones. De todas formas, dijo que a medida que pasen los meses verán de qué manera organizarse.
Luego de múltiples audiencias, reclamos y medidas de fuerza, la problemática que atraviesa el rubro siderúrgico sigue sin solucionarse. El gremialista le comentó a El Diario de la República que ellos piden un setenta y cinco por ciento de aumento correspondiente a diciembre, enero y febrero, pero desde la Cámara Argentina del Acero y la Siderca ofrecen hasta el sesenta y dos.
“Es una diferencia de puntos que no podemos aceptar, por eso esperamos que en la próxima reunión de la semana que viene haya una propuesta que pueda resolver esa disparidad y ya terminar la paritaria hasta el mes de febrero”, explicó Gómez y añadió que en este tiempo de idas y vueltas ya se venció marzo y también les quedará pendiente negociar ese período atrasado.
El conflicto en las plantas de Acindar comenzó con la asunción del nuevo gobierno nacional, que decidió frenar la obra pública en todo el país. Las firmas siderúrgicas de la ciudad se dedican a la construcción de mallas especiales, estándares, tornillos y elementos que se utilizan para ese tipo de obras, es decir que resultaron perjudicados directamente.
Tras la medida gubernamental, la producción tuvo una baja del cuarenta y cinco por ciento, y provocó una ola interminable de reclamos que aún no logran resolver.
“Hay una dureza por parte del empresariado bastante importante y creo que en este sentido no debemos desconocer que la Cámara Argentina del Acero está comandada por el Grupo Techint, que está vinculado al nuevo Gobierno. Entonces, políticamente también está complicada la situación”, concluyó el secretario general.
Más Noticias