A Rodrigo lo salvó la Semana de la Dulzura

Un croquembouche alimentó el sueño de Rodrigo Salcedo en “Masterchef”. El bioquímico cordobés tuvo una de sus mejores performances cerca del final del ciclo con una de sus debilidades: la pastelería. Ya está entre los siete mejores participantes.

Los cocineros de la gala de eliminación tuvieron que hacer una torre de profiteroles rellenos de crema pastelera, una prueba que estuvo en todas las temporadas del programa y que, por su complejidad, generó muchas dificultades.

Desde el inicio de la cocción, Rodrigo tuvo problemas para llevar adelante la preparación: fue el último en poner los profiteroles en el horno y al momento de presentar el plato tuvo que hacerlo sobre una bandeja de cocción. Sin embargo, tuvo muy buenas devoluciones, sobre todo de Damián Betular, el especialista en cocina dulce.

En la emisión del domingo también hubo tiempo para que Rodrigo hiciera su habitual show de simpatía y juegos de palabras con los miembros del jurado, una circunstancia que lo ubica entre los preferidos del público.

Al momento de anunciar los salvados, Salcedo fue parte del grupo inicial, o sea, que su plato estuvo entre los cuatro mejores de la noche.

El jueves, el bioquímico había conseguido una estrella que le dio la posibilidad de participar en un desempate antes de la gala de eliminación. La miniprueba consistió en hacer un bife a la sartén con manteca, hierbas y ajo al que el jurado probó el punto y la sazón.

La prueba quedó en manos de Aquiles, un participante que se especializa en la cocción de carnes.