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Hace sesenta años nacía el ídolo puntano: Juan Gilberto Funes

El "Búfalo" llevó a lo más alto el nombre de su querido San Luis. El recuerdo imborrable del máximo referente deportivo que dio la tierra de las sierras y los venados.

Por redacción
| 08 de marzo de 2023
Juan y la guitarra. La pelota, siempre cerca.

 Su impronta que comenzó con el “Globo” puntano, el “Millo” colombiano, esa idolatría con la primera Libertadores e Intercontinental con River, hasta su paso fugaz por Boca, su amor por los autos y su querida familia. Esa historia escrita por Juan Gilberto Funes con tinta indeleble quedó grabada en los puntanos.

 

Su talento innato y su habilidad para el gol lo llevaron a ser figura con cada camiseta que vistió.

 

Este amor comenzó en la década del '80. Juan, con 17 años, descollaba en Huracán; su físico era imponente y le sobraba oficio de goleador. Estudiantes, también de San Luis, fue el segundo club en el que deleitó a grandes y chicos, y ridiculizó a varios defensores. Jugó el Torneo Regional, enfrentó a Alianza de Villa Mercedes, Ferrocarril Oeste de La Pampa e Independiente de Mendoza.

 

 

 

En el '81 emigró a Sarmiento de Junín; allí estuvo una temporada, y desde Jorge Newbery de Villa Mercedes le hicieron un buen ofrecimiento y decidió retornar a la provincia. Jugó un par de partidos y el “Globito” nuevamente lo tentó. En 1982 fue la última vez que el “Tanque” jugó oficialmente en una cancha puntana.

 

 

El estadio provincial en La Punta lleva su nombre. En su ingreso y hall, su imagen está presente.

 

 

La temporada 83/84 lo encontró en Gimnasia y Esgrima de Mendoza, y gracias a su excelente performance fue vendido a Millonarios de Colombia.

 

River Plate fue el próximo escalón de su ascendente carrera: solo con dos goles le alcanzó para transformarse en ídolo indiscutido. Dos goles nada más y nada menos que en la final de la Copa Libertadores de América; esos tantos le dieron el título y la posibilidad de ir a jugar a Japón y traerse la Copa Intercontinental.

 

También vistió la camiseta de la Selección Argentina en los IX Juegos Panamericanos de Venezuela y la Copa América 87.

 

Olympiacos de Grecia, en 1987, le abrió la puerta europea, y tras un año sin mayores satisfacciones retornó a la Argentina y jugó en Vélez Sarsfield.

 

Dicen que provocar una sonrisa es más difícil que desprender una lágrima, y Juan fue un especialista de la alegría: despilfarraba felicidad, recolectó amigos por puñados que aún hoy lo recuerdan e idolatran.

 

 

►  EL GOL 3.000 DE MILLONARIOS

 

 ¿Por qué es una leyenda?

 

 En cada club que jugó fue un ídolo, y eso que estuvo poco tiempo. Su fuerza, su potencia, su carisma, su comportamiento dentro y fuera de los campos de juego, y sobre todo su manera de jugar, lo convirtieron en una leyenda que crece día a día.

 

El "Búfalo" de San Luis, autor del gol 3.000 en la historia de Millonarios, logró en su corto paso por el club ganarse el corazón de la hinchada, tanto por sus goles, como su polenta y entrega en el césped. Fue "millonario" hasta su último día y llevó alegrías aun tras su salida del club.

 

En 1984 llegó en silencio un muchacho de 21 años, grandote —medía 1,80 metro y pesaba 87 kilos—, con una única misión que por entonces se pensaba imposible: reemplazar al gran Wílmar Cabrera, aquel goleador de la selección uruguaya que triunfó en Millonarios y que acababa de ser transferido al Valencia de España, en la transacción más costosa del fútbol colombiano hasta entonces.

 

En sus primeras semanas, parecía que este muchacho no tenía la jerarquía para jugar en un club de los pergaminos del cuadro embajador, o tal vez su físico le impedía jugar al fútbol en la altura de Bogotá.

 

 

Funes poco a poco se fue adaptando al fútbol colombiano, y, de un momento a otro, se convirtió en un verdadero búfalo que generaba temor en los defensores. Pero no solo era fuerza: era amor por la camiseta, voluntad de lucha inclaudicable, un gran corazón dentro y fuera de la cancha, y mucho, mucho talento. Un fortachón con clase.

 

El 18 de noviembre de 1984 hizo historia. Fría noche en "El Campín"; corría el minuto 40 del segundo tiempo y Millonarios enfrentaba a Junior en el octogonal final. Norberto Peluffo cobra rápidamente un tiro libre, Miguel “Nano” Prince la baja y la coloca para que el “Búfalo” de San Luis, de certero cabezazo, anote el gol 3.000 en la historia de Millonarios. Aunque, a decir verdad, la historia no es tanto el gol 3.000, sino quién lo hizo: ¿alguien recuerda quién hizo el gol 1.000, el 2.000 o el 4.000?.

 

El "Búfalo" no alcanzó a durar dos temporadas completas en Millonarios. Cuando llegó era un completo desconocido del interior de Argentina, excepto para los empresarios, quienes, junto a la propuesta de vestir la de Millos, le ofrecieron jugar en España y Buenos Aires. Él se inclinó acertadamente por los colores azul y blanco. Pero muy pronto su fama se extendió, su nombre empezaba a sonar como el de una de las figuras más promisorias del fútbol gaucho, y River Plate hizo una tentadora oferta por sus servicios. Y esa ya es otra historia...

 

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