Por la pandemia, hubo un incremento de las consultas pediátricas

Profesionales de la salud advirtieron que aumentaron considerablemente las consultas pediátricas, como efecto del aislamiento social para detener el avance del coronavirus durante los últimos dos años. Los principales problemas son ciertos retrasos en el lenguaje, madurativos y síntomas relacionados al trastorno del espectro autista (TEA), según aseguraron a El Diario.

"Desde el inicio de la pandemia se vienen alertando consecuencias en la salud mental de niños y adolescentes. En los más grandes, por lo general, están relacionadas a lo emocional, como la ansiedad y depresión. En los más pequeños detectamos que hay un incremento en los problemas del neurodesarrollo", afirmó Carolina Anahí Ceresole, licenciada en Fonoaudiología y diplomada en Autismo, quien se desempeña en un centro de rehabilitación integral por calle Pedernera 219.

La profesional dijo que las restricciones, estar en casa todo el tiempo, en un entorno social acotado, donde el niño solo contaba con su mamá, papá y hermanos, afectó y tuvo mucho que ver con esta problemática.

"Es fundamental a temprana edad ver gestos, formas de articular al hablar, todo lo que las personas expresamos sin usar palabras. Esto se vio muy afectado en estos últimos dos años, sobre todo en 2020. Los niños salían a la calle y veían ojos y barbijos. Para un bebé que nació en pandemia o que tenía 1 o 2 años, su vida vincular fue muy distinta; incluso los padres tuvieron muchas dificultades para hacer consultas", dijo.

Daniela Aguilera es licenciada en Fonoaudiología y realiza sus actividades en un centro de terapia neurológica en calle Belgrano 823. "Hemos notado un incremento importante en pacientes que presentan dificultades con el lenguaje o con comportamientos relacionados al autismo", resaltó. Y agregó: "La falta de clases presenciales está directamente vinculada con esta situación, porque la escuela es un lugar importante en la detección temprana de trastornos. Se nota que han aumentado las complicaciones en el habla y esto impacta directamente en la adquisición de la lectoescritura".

Además, dijo que en el primer año de pandemia estuvieron solo autorizados a realizar las consultas de manera virtual, por lo que no pudieron hacer correctamente las prácticas y fue necesaria la colaboración de los padres.

Silvana González, quien también es licenciada en Fonoaudiología y atiende en un centro de salud en Almafuerte 458, remarcó: "El aislamiento incrementó el uso de dispositivos electrónicos. Es recomendable que los padres puedan controlar el tiempo que sus hijos pasan con estos aparatos, porque pueden afectar a su interacción

social. Utilizados de forma medida, con ciertas aplicaciones y ciertos videos, pueden ser de gran ayuda en montón de aspectos”.

También pidió que los padres no dejen de consultar a un profesional si su hijo tiene problemas para conectar con la mirada, reaccionar ante una sonrisa, o si tienen dificultades para hacer amistades o mostrar interés en otros.