El Estadio 974 verá en acción a Messi y luego será reciclado

Argentina jugará este miércoles ante Polonia (a las 22 de aquí, las 16 de San Luis) en el magnífico Estadio 974 de Doha. La tercera presentación del equipo nacional será en un escenario instalado en el paseo marítimo, con un balcón que permite observar el horizonte de la capital qatarí, y en el que el equipo de Scaloni intentará dar el paso a octavos de final.

Leo Messi dibujará su magia en ese césped y los habitantes de esas graderías tendrán el privilegio de ver un partido en un escenario y una historia que pasará al recuerdo de la eternidad.

Es que después de Argentina-Polonia, el 2 de diciembre jugarán Serbia-Suiza y el 5 de diciembre por octavos se enfrentarán el 1º del grupo G y el 2º del H, tras lo que el 974 (número del prefijo telefónico de Qatar) quedará descolgado para siempre.

Es el primer estadio que cumple con los requisitos de la FIFA que puede desmontarse totalmente y destinarse a otros usos, que es lo que sucederá tras el campeonato.

Su diseño es flexible, lo que permite volver a edificarlo para la misma cantidad de gente en otro lugar, o hacer varios campos más pequeños utilizando los mismos materiales.

El 974 fue construido utilizando contenedores de transporte marítimo y elementos modulares de acero, en homenaje al puerto cercano y a la historia industrial del sector en el que está instalado.

El diseño modular hizo que se necesitaran menos materiales de construcción que para los estadios tradicionales. Tiene una capacidad para 44.089 personas (la mitad de Lusail, donde Argentina jugó ante Arabia y México).

Está pensado para ventilarse de forma natural, por lo que no hace falta aire acondicionado (es el único de los 8 estadios que no necesita refrigeración).

Toda la estructura de acero del estadio puede reciclarse y reutilizarse después del torneo. Los métodos de aprovechamiento eficiente de los recursos hídricos empleados garantizan la reducción del consumo de agua en un 40% en comparación con un estadio convencional.

En el 974 veremos a Messi y compañía. Una función para el recuerdo de este estadio, de esta ciudad maravillosa y de este país deslumbrante. Messi será la última obra de arte viviente en dejar su huella. Que se preparen los fotógrafos del universo, porque después del paso del “10” el lugar volverá a ser un sitio industrial pegado al Golfo Pérsico.