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Destraban de a poco el mercado de granos

Por redacción
| 17 de enero de 2016

A un mes del inicio del gobierno de Mauricio Macri los cambios en el sector agropecuario han sido muy importantes y significativos. Después de las últimas medidas tomadas, es evidente que viene una mejora en el sistema de comercialización de granos.

 

El maíz fue uno de los más beneficiados por las nuevas reglas de juego según los especialistas. En cambio el productor de girasol sigue recibiendo poco por su mercadería.


Un ejemplo de esta situación es lo que sucedió con el mercado del maíz, producto que llegó a estar prácticamente parado en su comercialización debido a las restricciones que tenía para ser exportado y que actualmente tiene un margen de transacción mucho más fluido y con precios a los productores en torno al FAS teórico.

 


De todas maneras, pese a esta mejora todavía quedan problemas por solucionar. Especialmente en los mercados de trigo y de girasol, donde se registran fuertes descuentos de precios para los productores, una anomalía que ha sido denunciada por las entidades agropecuarias, en especial CRA.

 


Pero para analizar todos estos cambios en la política, y especialmente su impacto en los mercados agrícolas, hablamos con diferentes analistas y corredores del mercado quienes destacaron las mejoras y remarcaron los puntos que todavía quedan por solucionar.

 



Bacarín: “Hacia un esquema más amigable”

 


Uno de los especialistas que se refirió a la actualidad del mercado, su evolución en el último mes y lo que aún falta mejorar fue el corredor de granos Ricardo Bacarín, quien aseguró que “lo que se está empezando a ver es un tránsito hacia una comercialización más normalizada, pero es un fenómeno pausado, no intempestivo. Venimos de años donde los productores retenían la mercadería como reserva de valor y no tanto por especulación de precio. Inclusive en momentos como el año pasado, donde especular con trigo, maíz y soja fue un mal negocio teniendo en cuenta que el precio internacional tuvo una importante reducción”.

 


En esta línea, Bacarín destaca que “ahora vuelve a haber instrumentos para no continuar con esta práctica de especular reteniendo la mercadería. Hoy se puede vender la mercadería y comprar futuros. Puedo entrar en el interbanking y comprar los dólares si creo que es una mejor opción. Puedo quedarme con los pesos y comprar futuros de dólares. Es decir, hay una serie de alternativas que han recreado en las últimas semanas y que no se podían realizar en los últimos años. Así que los productores deben empezar de nuevo a repasar el manual de opciones y pergeñar estrategias que los excluyan o que les permitan absorber las bajas del mercado internacional”. Estas estrategias y herramientas a las que hace referencia Bacarín son fundamentales en el actual mercado y con las reglas de juego que imperan en este momento. 

 


Como decíamos más arriba, todos los actores del sector concuerdan en que sin la intervención del Gobierno, este nuevo escenario no hubiera sido posible. En este punto el corredor señala que “este esquema es mucho más amigable y comprensible que el que tuvimos en los últimos años”.

 


En cuanto a lo que todavía falta para el funcionamiento ideal del mercado, Bacarín destacó que el Gobierno ya hizo bastante de lo que tenía que hacer y que ahora le toca al campo jugar sus cartas. “Falta la respuesta del sector, que va a tener que reaccionar, tal vez la mayor liquidación de su producto es una manera de reaccionar. El productor puede seguir teniendo la mercadería pero sin sentase en el silobolsa, puede tener papelitos. De todas maneras sí, faltan muchas cosas. Falta que el sector se actualice mucho y que desde los mercados se haga mucha difusión sobre cómo se usan estas herramientas, porque estaban oxidadas”.

 


Por último se refirió al impacto que puede generar este nuevo mercado en los compradores. “La demanda va a tener que adaptarse a este nuevo mercado, que va a ser muy competitivo, va a tener que jugar de un modo no cartelizado y se generará entre ellos una competencia”.

 


Buján: “Las medidas que necesitaba el mercado”

 


Otro especialista al que consultamos fue el corredor de granos Javier Buján, quien también analizó los cambios en materia de comercialización de granos en el último mes. “Los cambios implementados hasta ahora están en el ideal del sector y son las medidas que necesitaba el mercado, que ahora puede actuar por sí mismo sin restricciones. A los cambios en el tema de retenciones y de ROEs hay que sumarle la eliminación del cepo y el sinceramiento del tipo de cambio, que te permite hoy comprar, vender, hacer lo que quieras con la mercadería. Esto le da una vuelta de rosca al mercado y ahora es el mercado el que tiene que seguir y ver qué pasa en el mundo. Hay que trabajar para recuperar compradores internacionales, porque eso te hace recuperar precios”

 


Pese al optimismo, Buján no desconoce que todavía falta solucionar algunos temas. “Hay algunos ruiditos en algunos mercados como el de trigo, pero van a ir acomodándose solos. Hoy la transparencia  es mucho más grande que en los últimos meses”.

 


En cuanto a las distorsiones y los descuentos de precios en girasol, el especialista destaca que “hay una situación histórica, y más allá de los cambios, hay un mercado distorsionado y tiene que ver con el manejo de la comercialización. En la medida que le des toda la mercadería a la demanda y después quieras ir poniéndole precio no vas a lograr el mismo mercado que si el productor se queda con la mercadería y después sale a defender el precio”.

 


Como lo destacaba Bacarín, Buján cree que “el propio sector debe hacer su parte, pero esto no significa que deba salir a vender toda su producción. Puede suceder que el productor venda solamente para cubrir los compromisos que tenía asumidos. Pero debe tener cuidado ya que acá también se corren riesgos y un ejemplo de ésto es lo que sucede con la soja. El productor que retenga debe saber que si llega con soja a la época de cosecha, el precio va a ser menor y ésa no es una buena estrategia”.

 


En cuanto al tema cambiario, Buján destaca no sólo el mejor precio en pesos que tiene el productor debido a la devaluación, sino la posibilidad de acceder a los dólares que antes tenía restringida. “Ahora el productor puede vender toda su cosecha, ir al banco y pedir que le cambien sus pesos por dólares, es un escenario nuevo que se abrió después de varios años” destacó.

 


Por último también señaló que todavía faltan problemas por resolver. Según el corredor, “hay correcciones que van a ir sucediendo de a poco y con una cuestión de competencia. Es cuestión de tiempo, pero lo importante es que las reglas que vienen de arriba sean claras y que no haya ningún tipo de trabas”.

 


López: “El mercado se está readecuando”

 


El consultor Gustavo López también analizó el último mes en el mercado de granos después de las medidas tomadas por el gobierno nacional. Al igual que lo hizo Buján, para él la baja de retenciones, el ajuste del tipo de cambio y el fin de las restricciones comerciales,  fueron tres aspectos fundamentales que relanzaron al agro argentino.

 


Pero además analizó los cambios en política agropecuaria desde la cuestión productiva. Según destacó, “las medidas no tienen efecto significativo sobre área sembrada y producción de este año. De todas maneras hubo un impacto menor, pero positivo en la campaña gruesa, especialmente en maíz, donde se evitó que la caída sea mayor”. En este punto agregó que las principales expectativas están puestas en la continuidad de estas medidas para el próximo ciclo, donde definitivamente se vería el efecto en la cosecha.

 


En cuanto a la cuestión de los precios, López analizó los tres principales productos y su actualidad. Según señaló, “la soja está pagando por encima de lo que se puede pagar”, pero añadió que “es una cuestión coyuntural porque el mercado está invertido”. Sobre el maíz dijo que “se están copiando los niveles de precios del mercado internacional y en línea con la eliminación de las retenciones”. En tanto, sobre el trigo advirtió que “todavía tiene problemas, específicamente por los stocks abultados, y segundo por la calidad. Eso hace que haya dos mercados, uno de calidad normal y uno de baja calidad, que es el que está con mayor protagonismo”.

 


Consultado por el desempeño de la comercialización en este último mes, dijo que “depende del producto”. Y que además se nota una mejora “porque antes tenías incertidumbre de colocación por las restricciones. Es decir, antes tenías dudas no sólo sobre el precio, sino también sobre si podías vender o no la producción. Ahora creo que se dispersó bastante el panorama. El productor está viviendo una situación más optimista que si no es mejor es debido a que los precios internacionales no son espectaculares. A pesar de todo hoy vendés mejor que lo que lo hacías hasta el año pasado, inclusive con los puntos negativos”.

 


Como el resto de los analistas del sector, López coincide con que el girasol es el cultivo con menos transparencia ya que “hay una concentración muy fuerte entre los demandantes”.

 


Por otro lado también ve con buenos ojos la posibilidad de acceder al dólar. Esto, señaló, le da más certeza al productor y puede que reduzca la propensión a seguir reteniendo. Ahora el productor puede buscar opciones de inversión que no son necesariamente las de retención del grano. Esta situación hace que analice de manera más finita la comercialización de cada cultivo y pueda ir cambiando el mix de ventas.

 


Por último, el consultor señaló que ahora el productor se enfrenta a un escenario que en los últimos años le era ajeno para algunos productos. “Queda muy explícito que entraste al concierto internacional, que antes no lo tenías. Ahora tenés una relación directa con los precios internacionales”, examinó. Pero no sólo este nuevo punto de análisis se les abre al productor y al Gobierno, también se debe tener en cuenta que si con estas medidas crece la producción hay que comenzar a trabajar en otro tipo de problemáticas, como son la logística, la infraestructura y los fletes entre otras cuestiones.

 


Olivero: “El maíz es el gran beneficiado”

 


El último analista con el que dialogamos sobre los cambios en materia de política agropecuaria y su impacto en la comercialización de los granos fue Sebastián Olivero.

 


Según el especialista, “el maíz es el gran ganador ya que viene pagando en línea a lo que dice el precio FAS, o inclusive por arriba”. Lo mismo pasa con la soja, pero con este producto no había  inconvenientes en el pasado. En tanto, el trigo “sigue más rezagado pero no por disposición oficial, sino por cuestiones del mercado y éste se va a ir corrigiendo solo y achicando los descuentos actuales”, analizó.

 


Por otro lado, Olivero también destacó la necesidad de que se fomenten las características propias del mercado. “Una herramienta importante a potenciar son los futuros y opciones en el Mercado a Término (MATba). Hay muchas maneras desde buscar capacitaciones, hasta pretender que el Gobierno intervenga con algún tipo de ayuda para difundirlas”

 


Por otro lado, consultado por lo que falta resolver, destacó que es necesario “simplificar la enorme burocracia generada en estos últimos años. Porque a mayores complicaciones, mayores dificultades para hacer bien las cosas”. Por último, Olivero se mostró optimista de cara a la evolución del mercado en los próximos meses; y si bien señaló que “va a llevar tiempo”,  también destacó que “cuando las variables se estabilicen totalmente, el mercado por sí mismo se va a ir acomodando aún más”.

 


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