PANE: ensalada rusa con pollo causó la intoxicación masiva de alumnos en Luján

Más de 70 alumnos de la Escuela N° 351 de Luján, entre nivel primario y secundario, resultaron intoxicados tras consumir viandas distribuidas por el Programa de Asistencia Nutricional Escolar (PANE). Según relataron padres y madres, el plato que desató la emergencia fue una ensalada rusa con pollo, repartida el martes 13 de mayo. Los únicos que no enfermaron fueron los niños del jardín de infantes, que no asistieron ese día a clases.

La comunidad escolar todavía intenta reponerse del episodio. Vómitos, diarrea, fiebre alta (algunos casos superaron los 39°) y cuadros de deshidratación llevaron a decenas de chicos a los hospitales de Candelaria, San Francisco, Quines y San Luis capital.

 “Yo tengo tres hijos, dos de ellos están internados. Todos van a la escuela N° 351 (o El Molino). El tercero afortunadamente está bien, porque el martes cuando entregaron la ensalada no hubo actividades en el jardín de infantes y es por ello, que no hay niños de esta edad contaminados”, conjeturó uno de los padres en diálogo con El Diario de la República. “Felizmente la situación no pasó a mayores. Mis hijos están evolucionando, aunque aún están con algo de fiebre”, agregó con algo de alivio.

Los progenitores sospechan firmemente de la ensalada rusa con pollo porque el lunes, a través del PANE, se entregaron en el almuerzo viandas de milanesas con puré. El martes, ensalada rusa con pollo y, el miércoles, empanadas de jamón y queso. Todos los que consumieron la ensalada fueron hospitalizados, incluso una maestra.

El miércoles a primera hora, los síntomas se replicaron en simultáneo. “Todos empezaron con fiebre, vómitos y diarrea a la misma hora. No creemos que esto sea una simple gastroenteritis, como dijo el gobierno provincial. Fue una intoxicación”, fustigó.

“El drama de nuestra familia comenzó coincidentemente el miércoles bien temprano. A mi hijo de 6 añitos no pude llevarlo a clase porque estaba con diarrea. En tanto que la nena de 10 años si lo hizo, pero no comió las empanadas de jamón y queso. A las horas, el hospital ya estaba colapsado con los chicos intoxicados”.

Horas de mucha conmoción

Al recordar los momentos de mayor desesperación, dijo que hubo mucha preocupación y tensión, porque “costó muchísimo bajarle la fiebre a los niños y niñas, que en algunos pacientes llegaba a los 39,3°”.

Al verse superada la capacidad del hospital lujanense, algunos alumnos fueron enviado a los hospitales de Candelaria, San Francisco y Quines, en tanto que los casos más complejos fueron traslados al hospital Pediátrico de San Luis. “No vemos que sea una simple gastroenteritis, todos empezaron con la fiebre, los vómitos y la diarrea a la misma hora”, detalló.

Desde el hospital Pediátrico informaron que los cuadros más graves fueron estabilizados y evolucionan favorablemente. Aun así, muchas familias permanecen en vilo por la salud de sus hijos.

“Mis hijos no vuelven a comer en la escuela”

Mientras cuidaba a sus dos hijos que siguen internado, el padre que detalló lo sucedido el miércoles en Luján, adelantó que el lunes habrá una reunión con los directivos de la escuela para evaluar todo lo acontecido y para ver cómo se sigue.

“Después de esto mis hijos no seguirán comiendo en la escuela, porque quedamos con desconfianza”, indicó y añadió que “la bronca es generalizada”

Luján está en el centro de la escena por un caso que podría haberse evitado. La comida en mal estado servida en una escuela pública puso en riesgo la salud de decenas de niños y niñas.