"El premio es un reconocimiento al trabajo"

El día después de su noche de conquista en Tucumán fue largo para Julio “Manolo” Maiztegui. Con el Martín Fierro al mejor programa de servicios del interior del país en su poder y tras unas primeras sensaciones de obnubilación, el periodista villamercedino viajó diez horas en auto y llegó a su casa el domingo a las 8 de la noche. El teléfono, literalmente, estaba a punto de estallar.

“Todo esto que nos está pasando es increíble, definitivamente increíble”, le dijo a El Diario de la República a poco de estar otra vez en su hogar. “Estamos felices y sorprendidos, no lo podemos creer todavía”, concluyó.

Cuando Julio habla en plural posiblemente incluya en las sensaciones a su esposa, quien lo acompañó en la noche de gala, y a Andrés Oviedo, encargado de las cámaras y la edición de “Inspirar TV”, quien también subió a recibir el premio. “Es un capo, no puedo decir otra cosa de él”, sostuvo el periodista.

El hecho de haber sido parte de la ceremonia de entrega de los Martín Fierro (“algo que siempre vemos por la tele”) se convirtió en algo así como un sueño cumplido para “Manolo”, quien el lunes tiene que ir a trabajar como todo el mundo.

Ante todo agradecido, Maiztegui dijo que es “un orgullo inmenso haber representado a San Luis y haber traído el premio a la provincia”. Y a los primeros a los que les demostró gratitud es a “todos los emprendedores que formaron parte del programa”. Muchos de ellos fueron los responsables que su teléfono estuviera colapsado durante todo el domingo.

“La estatuilla –agregó el conductor- es un logro. Es un reconocimiento al trabajo, a los kilómetros, a salir a la ruta con piedra, con lluvia, con viento, con frío, con calor, mal dormidos, mal comidos. Pero cuando uno hace las cosas con pasión, nada de eso importa”.

Entre la emoción, el orgullo y las ganas de festejar, “Manolo” aseguró que el premio le abrirá puertas y que la ceremonia tucumana le permitió tener un montón de contactos nuevos “que nunca me hubiera imaginado tener”.