Con la casa dividida, así quedó la placa de nominados

Como todos los miércoles, los participantes de Gran Hermano ingresaron al confesionario para emitir sus votos, pero esta semana fue especial. Tras una de las emisiones más sorprendentes que sucedió el martes cuando sonó el teléfono rojo, la casa tomó otro rumbo y los jugadores armaron la placa de acuerdo a sus preferencias y sensaciones sobre los compañeros.  

Al atender el teléfono, Nicolás recibió el beneficio de un asado junto a dos compañeros, en el que estaban habilitados a complotar. El jugador eligió a Bautista y Martín quienes obtuvieron la posibilidad de poner a alguien directamente en la placa para la gala de eliminación del domingo. Sin embargo, lo que nunca supieron, es que el resto de los jugadores pudieron ver en vivo sus diálogos a través del televisor del living.

Lo que generó este supuesto beneficio es que los amigos expusieron sus ideas y análisis del juego de muchos de los participantes, algo que provocó malestar y un quiebre definitivo en la casa. Por un lado, se encuentran los “Bros” y, por el otro lado, el resto de los jugadores que tienen como líderes a Juliana y a Emmanuel.

En todo este contexto, los tres jugadores decidieron poner a Darío en la placa del domingo y enfocar sus votos contra Manzana. El resto de los jugadores ingresaron al confesionario con toda esta información previa e hicieron sus propios movimientos. Finalmente, quienes quedaron nominados con el hombre de La Plata fueron Federico, Nicolás, Martín, Florencia y Mauro.

Este jueves a la noche se define quién sube y quién baja de esta placa. La decisión la tendrá Bautista que quedó elegido como el líder de la semana.