"Sueños del arte" empezó los festejos por la Semana de la Puntanidad

Pasadas las 10, desde el edificio de la Secretaría de Cultura, frente a plaza Independencia, los músicos pertenecientes a las bandas marciales de  "Sueños del arte" comenzaron una intervención con marchas patrias y temas tradicionales del cancionero cuyano con el que se abrió el calendario por los festejos del cumpleaños de la provincia. Terminó una hora después en la plaza Pringles. 

El recorrido de la orquesta fue corto pero nutrido de personas que se pararon un minuto a filmarla, aplaudirla o simplemente admirarla mientras sonaban los platillos, las flautas traversas y las trompetas. 

La banda marcial pasó por la peatonal Rivadavia al ritmo de la Marcha de las Malvinas. La seriedad de los músicos se contrarrestó con el público que se notó agradecido al ver un poco de movimiento musical en la cálida mañana invernal. 

Desde los balcones de los comercios que rodean la peatonal, salieron madres con sus hijos que aplaudían al ver pasar la orquesta. Otros, prefirieron taparse los oídos. Abajo, los comerciantes dejaron por un minuto su trabajo para ver qué ocurría entre tanto sonido y movimiento. 

Los músicos de "Sueños del arte" cruzaron la calle frente a la iglesia Catedral, atravesaron la plaza y se acomodaron en la explanada, frente del monumento a Pringles que los observaba desde arriba junto a su caballo como una suerte de protector. 

La agrupación entonó el vals "Provincia de San Luis" y la zamba "Viva San Luis". Para la próxima canción, que fue la cueca "Pa´ mi cuyana", una de las instrumentistas invitó a los curiosos a que la bailaran al frente de todos, pero los oyentes prefirieron seguir con el disfrute auditivo. 

El sol comenzó a calentar cerca de las once de la mañana mientras la orquesta decidió cambiar el repertorio y dedicarle unas melodías a lo más popular, como la cumbia y el cuarteto. 

Pero antes, entonaron la Marcha a San Lorenzo para no olvidarse del momento histórico que protagonizó José de San Martín, un día antes de su recordatorio en el calendario patrio.