Arizona decretó "feriado futbolero": juegan los Solari

A las 16:30 se paraliza Arizona, el intendente de la localidad del sur provincial, Ariel Figueroa, decretó “feriado futbolero”. El pueblo tiene un cartel imaginario que dice “Cerrado de 16 a 18:30”. El tránsito reabrirá al final del partido que jugarán River vs. Defensa y Justicia, a partir de las 16:30 en el “Monumental” por la 19ª fecha de la Liga Profesional de fútbol en Argentina.

Será la primera vez en la historia del fútbol puntano que dos hermanos nacidos en la provincia, Pablo Solari y Santiago Solari, se enfrentarán jugando por la máxima división de AFA. Pablo, con la camiseta del “Millonario”, y Santi, con la del “Halcón” de Florencio Varela.

Papá Víctor maneja y mamá Susana oficia de copiloto. Atrás viajan la tía Mirta y el primo Daniel.

En otro auto van Eugenia, hermana de los picantes Solari por parte del papá, junto a su marido Jorge, y Renato y Julia, sobrinos de los delanteros de River y Defensa y Justicia.

Otros familiares ya están en Buenos Aires.

“Estará la mitad del pueblo, los de River alentando a Pablo, y la otra mitad, los de Boca, haciendo fuerza por Santi”, dice Víctor, entendiendo la emoción que hay en Arizona, el pueblo de mil quinientos habitantes del departamento Dupuy.

Solari padre habla con El Diario de la República estacionado a la vera del camino, cerca de General Villegas. Víctor (56) y Susana (53) están juntos hace 27 años. Tienen seis hijos: Matías (26) es el mayor y está en Buenos Aires haciendo la especialización en medicina; luego Santi (25), Pablo (22), Mateo (21) que juega en GEPU y es defensor, Sofía (19) que estudia medicina en San Luis, y Juan (16) que juega en las inferiores de Vélez y es delantero.

Susana avisa que hoy no se gritan los goles: “Tengo que ser neutral, los dos son mis hijos. Que salga todo bien y lo disfruten mucho, que se sientan bien, eso es todo lo que quiero”.

Y Víctor asume: “Es una fecha muy especial, la verdad es que esto es bárbaro, vamos a disfrutarlos. Cuando desde chicos jugaban se soñaba un poco con esta posibilidad, siempre estaba latente, pero nunca pensás que puede ocurrir, hasta que pasa. Soñar es lindo”.

La mamá analiza a sus hijos afuera de la cancha: “Evito decirles si juegan bien o mal, de eso se encarga el papá; yo prefiero contenerlos. Para mí los dos siempre juegan bien”. Asegura que “Pablo es como el papá, más tranquilo, y Santiago se parece más a mí, más eufórico. Distintos, pero excelentes personas”.

Papá, exdelantero, pone la mirada futbolera. “Son similares en que los dos tienen mucho coraje, porque la verdad es que para estar donde están hay que tenerlo. Pablo es más tranqui, más pensante, y Santi juega más con el corazón y es más aguerrido. Los dos son rápidos, tienen potencia y la misma sangre”, admite y sonríe.

Luego adelanta las sensaciones que experimentará esta tarde: “Voy a estar tranquilo, la verdad es que estoy disfrutando mucho; soy de River de toda la vida, pero la sangre está primero. Será disfrutarlos, tranquilo y en silencio; también lo hago en cancha de River cuando Pablo juega contra otro equipo. Será eso, disfrutar la fiesta en la cancha de River, que está hermosa”.

Víctor dice que “el día previo no los molesto ni los llamo, nada. Ya anoche (por el jueves) charlamos un ratito con los dos y listo”.

Este sábadoise junta toda la familia y verán el partido desde la platea Belgrano Baja. Eso sí, al final habrá festejo asegurado: “Nos juntaremos después, a la noche, y se festejará”.

“Pablo y Santiago apostaron una orden de compra por ropa y sé que algo más. Hace rato, desde que saben la fecha del partido, que se vienen cargando”, dicen papá y mamá, y aseguran que “debe ser algo hermoso enfrentar a un hermano jugando el deporte que los apasiona, y enfrentarse en ese estadio (los dos son hinchas de River) será maravilloso”.

 Redacción / NTV