Los penales de Montiel, Lamela y Ocampos le dieron otra copa al Sevilla

Con la definición de Gonzalo Montiel en el último penal, el Sevilla de España se consagró este miércoles campeón de la UEFA Europa League, tras vencer desde los doce pasos por 4 a 1 a la Roma de Italia, luego de empatar 1-1 en los 90 minutos reglamentarios y permanecer sin variantes los 30 minutos del tiempo suplementario, en el estadio Puskas Arena de Budapest (Hungría).

El lateral argentino aseguró el penal definitivo, después de haberlo repetido por un adelantamiento del arquero Rui Patricio, con un remate fuerte al medio y celebró junto a sus compañeros la obtención de este trofeo por séptima vez en la historia para el equipo andaluz y la clasificación a la próxima UEFA Champions League.

La Roma, comandada por Paulo Dybala, estuvo mejor en la primera etapa, con mucho juego con pelota dominada y con intenciones desde el comienzo.

Sin embargo, pudo concretar con el gol recién a los 34 minutos con una definición cruzada del mediocampista cordobés tras una gran asistencia de Gianluca Mancini para poder vencer finalmente al arquero marroquí Bono.

A los pocos minutos del complemento, Dybala sentiría un dolor que le impidió continuar en el partido y sería reemplazado, algo que le cortó chances al equipo romano y acrecentó las oportunidades del Sevilla de los argentinos.

Erik Lamela y Montiel entraron para darle otro aire al partido y cambiaron la historia para los andaluces.

En el complemento, Sevilla salió desde vestuario decidido a ganarlo y apretó al equipo italiano más de lo que se esperaba y lo tuvo en su campo hasta que pudo igualarlo por intermedio de una mala fortuna de Mancini, tras no poder despejar un centro atrás de Jesús Navas.

El encuentro transcurrió muy parejo para ambos hasta la llegada del tiempo extra. Durante el alargue, ambos equipos no se sacaron ventajas y estiraron el partido hacia la definición desde los doce pasos.

Bono tuvo una gran actuación al atajarle el penal a Mancini, mientras que Ibáñez erró el segundo penal para Roma al darle a uno de los palos.

Lucas Ocampos, Erik Lamela e Ivan Rakitic convirtieron sin problemas, pero el más importante, el de Montiel, no falló y le dio otro campeonato al equipo que dirige José Luis Mendilibar.

NA/MGE