Robó una camioneta y piden 2 años de condena

Marcelo Gabriel González Oroz tiene 23 años y admitió haber robado una camioneta el 16 de diciembre del año pasado en la zona sur de la capital, que luego dejó en el barrio República. Lo hizo para sostener el acuerdo al que arribaron el fiscal de Juicio Fernando Rodríguez y el defensor Oficial Esteban Sala para que la causa no sea elevada a debate oral y se resuelva con una condena abreviada a dos años de prisión efectiva.

El día del hecho, la víctima, un panadero de apellido Moyano, le contó a El Diario que había dejado encendida su Peugeot Partner mientras entregaba mercadería en un comercio de la manzana L del barrio 544 Viviendas, sobre el bulevar Granadero Rodríguez.

“Prácticamente entré y salí. Como las mañanas para mí son intensas, siempre dejo la camioneta en marcha, ya que no tardo más de tres minutos en volver a subir. Cuando pasé la puerta del negocio levanté la vista y vi que mi camioneta salió volando”, narró el hombre.

Una hora después del hurto, luego de que la Policía desplegara un operativo cerrojo en la capital, un efectivo de la Policía Ciudadana observó al vehículo en el extremo oeste de la ciudad, mientras ingresaba al barrio República por calle Montenegro.

González Oroz y el cómplice con el que actuó robaron distintos bienes, entre ellos la batería de la Peugeot, que luego abandonaron en la manzana 10 de ese vecindario.

Pero el imputado no fue tan rápido como su compañero y terminó detenido a pocos metros. Del otro sospechoso, quien huyó por unos pastizales, nunca más se supo nada.

El panadero asistió a la presentación del juicio abreviado y, al ser consultado sobre si estaba de acuerdo con la condena pautada, respondió brevemente: "Yo solo quiero que la Justicia haga lo que tenga que hacer".

A la audiencia la impulsó un tribunal colegiado unipersonal representado por Julio de Viana, quien tendrá diez días hábiles para dictaminar si hace lugar o no a lo peticionado por el fiscal y el defensor del imputado.

El acusado regresó al Servicio Penitenciario, donde está alojado desde el día de su detención y donde ya había purgado una condena por robo.

En caso de que el magistrado avale la petición, al joven le quedará menos de un año para recuperar su libertad, teniendo en cuenta el año que pasó preso.