Camilo Nicolás gira por San Luis con "Es un montón"

Seguirle el ritmo a Camilo Nicolás no fue una opción para Nardo Escanilla, su compañero en la dupla humorística “Camilo y Nardo”, que se separó a principios del año pasado con nada de polémica y mucho de comprensión. Este hecho, que sucedió dos meses antes de que se declarara el aislamiento social en Argentina, marcó a Camilo para su futuro. En la actualidad, armado y expectante, llega a la provincia con “Es un montón”, un proyecto que nació en pandemia, lo mantiene contento y desea compartir con el público antes de comenzar a despedirlo.

Camilo brindará tres funciones en San Luis durante el fin de semana. La primera será este jueves a las 21 en el Boliche Don Miranda, de Villa Mercedes; la segunda, mañana a la misma hora en Picasso, de San Luis capital, y la tercera función llegará el domingo eleccionario a las 21:30, en el teatro El Viejo Varieté, de la Villa de Merlo. Para cualquiera de las tres funciones las entradas tienen un valor de 900 pesos y se venden por la página de Passline.

El espectáculo que llevo a San Luis fue mi salto a mi carrera solista; tuve que armar los chistes desde cero". Camilo Nicolás, humorista.

 

Camilo está muy satisfecho con su presente en solitario y aseguró que el público puntano se divertirá con las ocurrencias que llegaron después de la separación. Además, está entusiasmado por comer alguna comida típica de la provincia y disfrutar de la noche puntana en su estadía. “El show está dividido en diferentes monólogos que pasan por temas de todo tipo; uno de ellos es la pandemia y las experiencias personales que quizás son similares a las que muchos transitaron”, adelantó.

“Es un montón” es un espectáculo que pasó de ser un exitoso encuentro vía streaming a un unipersonal pícaro y esperado por la audiencia. Camilo tuvo la suerte de triunfar en la virtualidad con este proyecto y pasó lo mismo cuando volvió al ruedo en los teatros cordobeses. Ahora llegó el turno de mostrarlo en diferentes ciudades del país, algo que el humorista esperaba con ansias.

Nicolás expresó que con esta gira comenzará a despedir a su primer “hijo profesional”, porque es hora de planear otros proyectos y darles un descanso a los chistes que nacieron en la pandemia. “‘Es un montón’ fue muy amado, porque me dio la posibilidad de trabajar en épocas de escasez", agregó el humorista, quien señaló que en el show dejó la improvisación en segundo plano.

Las redes sociales también son un punto fuerte para Camilo. Las elige para contar su día a día y compartir sus ocurrencias con el público. Su pico de popularidad se dio en Instagram, cuando subía videos junto a Nardo, y a partir de allí la gente lo comenzó a seguir con fidelidad. “No podría concebir una vida sin las redes sociales; son parte de mi vida y me gustan demasiado”, aseguró.

Al hablar de Nardo —con quien vino varias veces a San Luis—, Camilo aseguró que “fue un  desenlace aburrido, con poco gusto, porque no tuvimos ni media polémica. Somos hermanos de corazón con intereses diferentes y eso fue totalmente respetado desde el primer día”. Mientras que a Camilo le entusiasmaba seguir con más de 70 funciones por mes sin descanso, Nardo prefirió la tranquilidad de su casa. Esas diferencias fueron consensuadas por la dupla sin alteraciones.