El lunes comenzará a funcionar el Centro Integral de Protección
El servicio estará disponible todo el día ante urgencias. Las víctimas deben comunicarse al 104.
A partir del lunes, comenzará a funcionar el Centro Integrador de Protección (CIP) donde las víctimas de violencia de género podrán acceder a un espacio de contención y refugio que gestionará la Secretaría de la Mujer, Diversidad e Igualdad. La responsable de la Secretaría, Ayelén Mazzina, firmó el convenio y las actas correspondientes junto con la ministra de Ciencia y Tecnología, Alicia Bañuelos, quien también se desempeña como rectora de la Universidad de La Punta.
"Este centro va a estar dirigido a mujeres y personas del colectivo LGBTIQ+, que sean mayores de edad y que se encuentran viviendo situaciones de violencia por motivos de género. En el caso que haya personas que tengan hijas, hijos o hijes también van a poder ingresar al espacio", explicó la responsable del CIP, Tamara Cejas Castagno.
Según indicó la funcionaria, el espacio tiene 28 departamentos totalmente equipados.
"Tenemos bastante capacidad e incluso en el caso que se colapse y que tenga que haber más de una persona por departamento, estos cuentan con dos habitaciones, así que están todas las condiciones dadas para que haya comodidad el tiempo que dure la estadía dentro del espacio", explicó Cejas Castagno.
El CIP también contará con un equipo de abordaje interdisciplinario compuesto por abogadas, psicólogas, trabajadoras sociales y un equipo de operadores que estarán las 24 horas.
"El Centro de Protección es una herramienta más que brinda el Estado a través de la Secretaría de la Mujer, Diversidad e Igualdad para prevenir y erradicar las violencias y para acompañar. El objetivo final es vivir una vida libre de violencias, vamos por ese camino", indicó la funcionaria.
El servicio va a funcionar las 24 horas ante cualquier urgencia. Las víctimas deben comunicarse a la línea telefónica de la secretaría, el 104, en caso de sufrir alguna situación de violencia.
"El equipo interdisciplinario va a evaluar si la persona tiene las condiciones para ingresar al CIP. Si cuenta con las características y se produce el ingreso, la idea es desde el comienzo ir pensando con el equipo interdisciplinario cuál va a ser el egreso de esa persona, lo más acompañada y cuidada posible, siempre pensando en cuáles son las necesidades o cuáles son las emergencias para acompañar", contó.
En la firma del convenio, Mazzina dijo que esta política era una deuda con la sociedad. "Significa también una reparación histórica con la que buscamos llegar a quienes están atravesando una situación de violencia por motivos de género, desde la detección, protección, seguridad, asesoramiento legal, fortalecimiento de las potencialidades propias y capacitación laboral", dijo.
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