Recuerdos con aroma a hogar y frío patagónico

Una buena forma de conectarse con su hogar y volver a su pueblo, aunque sea por un ratito, es a través de la música y es por eso que el neuquino Nicolás Pérez toma como musa a su pueblo natal Bajada del Agrio. En algunas de sus canciones el músico cierra sus ojos y se transporta a los paisajes ventosos y nevados de la Patagonia argentina o simplemente estaciona su mente en el patio de su casa.

Este jueves a la noche el joven llega a la provincia con un folclore arraigado en sus orígenes. Tocará por primera vez en San Luis en el bar La Esquina, ubicado en la calle Las Heras 495. La guitarra y la voz de Nicolás sonarán desde las 21:30 en un show acústico e íntimo en el que hará un repertorio de temas de su autoría y algunos covers de canciones hechas por sus amigos más cercanos.

Luego de salir de su provincia por primera vez después de que inició la pandemia, y tras haber pasado por Córdoba, Nicolás llega a San Luis por primera vez para desplegar sus temas de folclore.

“Quería pasar por la provincia para conocer y tocar, si tenía la posibilidad. Por suerte tengo unos amigos puntanos que me dieron una mano e hicieron posible el show de hoy, así que estoy muy contento”, relató el cantante de 28 años que trae zambas, cuecas, gatos, chacareras y tonadas en su cancionero.

Nicolás aprendió sus primeros acordes a los 10 años. Luego, a la guitarra criolla le sumó su voz. Sin embargo, no fue hasta los 20 que decidió dedicarse profesionalmente a la música. A partir de allí empezó a componer sus propios temas y ahora, como el clima al que está acostumbrado, planea sacar su primer álbum en el invierno.

“El nuevo material contará con canciones de mi autoría que hablan de mi lugar, mi provincia, mi pueblo y todo lo que me lleva para allá. Generalmente, como estoy mucho tiempo fuera de mi casa, hay muchos temas que hablan de volver, del paisaje o cosas que he hecho allí. También hay muchos personajes como mis amigos, mi madre, mi padre y el patio de mi casa con sus frutales”, detalló Nicolás sobre Bajada del Agrio, una localidad rural, de 600 habitantes,     que se encuentra a pocos kilómetros de la Cordillera de Los Andes.

Tras su paso por San Luis, continuará por San Juan antes de volver a su amado Neuquén.

Para el músico volver a los escenarios es una “bocanada de aire fresco”. “Es hermoso tocar otra vez con público después de tanto tiempo sin poder hacer lo que a uno le gusta y sin laburar, porque para el artista es muy importante seguir, mostrar y apostar a lo que uno tiene”, concluyó.

 Redacción - NTV