Tres puntanos participaron en la feria de editores
Dos escritores y una librera merlina pasaron el fin de semana en un reencuentro necesario y literario.
La feria de editores que se realizó el fin de semana en Buenos Aires reunió a más de 16 mil personas que recorrieron los stands de todas las editoriales del país y celebraron, además de los diez años del encuentro, la posibilidad de volver a verse la cara.
Entre la multitud de amantes de la literatura que pasó desde el viernes hasta el domingo estuvieron los escritores merlinos Joaquín Vázquez y Gustavo Menéndez, quienes estuvieron acompañados de sus editores. Se sumó a ellos Lucía Miranda, propietaria de una librería en Merlo.
Al comienzo de la feria, el viernes, el movimiento de público fue nutrido, aunque estaba destinado exclusivamente a libreros, que consiguieron importantes descuentos y pudieron hacerse de las novedades del mercado editorial, aunque algunas de las ediciones fueron más bien de corta tirada, por la inactividad pandémica y por lo apurado de la organización.
"Además de las compras que hicimos, conocimos muchas editoriales nuevas con las que hicimos contacto", dijo Lucía, propietaria de Hexámetro.
Entre el sábado y el domingo, cuando el público explotó en el Parque de la Estación, en el Abasto, sede de la feria, fueron los escritores los que tomaron el protagonismo. Allí Vázquez, quien recientemente lanzó "¿Qué es una criatura?" por la editorial cordobesa Cartografías, y Menéndez, quien presentó su nueva novela "Lo que se lleva en la sangre", charlaron con los lectores y con sus colegas.
"Fue un fin de semana de reencuentro, en el que pudimos vernos a la cara con gente que hace tiempo no veíamos", dijo Menéndez, quien presentó de manera extraoficial su nuevo libro y firmó algunos ejemplares. "Viajé, entre otras cosas, porque quería ver cómo había quedado la edición impresa de mis libros", sostuvo el escritor.
El lanzamiento de "Lo que se lleva...", un atrapante relato que une a una abuela con muchos secretos y a su nieto, de relación incestuosa con su prima, fue reducido, debido a que la editorial no alcanzó a hacer más cantidad de copias. A modo de demostración jocosa, Gustavo dijo que apenas pudo traerse tres ejemplares de su novela a Merlo, los únicos que quedaron sin venderse.
A principios de noviembre, Menéndez tiene previsto hacer la presentación oficial de la novela en su localidad.
A modo de resumen de lo que se encontró en la feria, el autor —también periodista— dijo que pudo ver material de mucha calidad y que daba gusto recorrer los stands que presentaron las editoriales.
Según la organización, más de 200 sellos independientes fueron parte del encuentro que tuvo además charlas presenciales y virtuales.
Con un sábado lluvioso y el domingo marcado por la marea de gente que asistió, la feria funcionó como experiencia piloto de presencialidad en la Ciudad de Buenos Aires.
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