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Proyectan algunas reformas en el funcionamiento de la Policía

Jerarquizarían áreas, como Científica, Medio Ambiente y Turística. También incluirían una de la Mujer.

Por redacción
| 13 de agosto de 2020
Luciano Anastasi asumió el lunes como titular del ministerio.

Cambios en los horarios en que los policías cumplen sus funciones y en el sistema de evaluación para los ascensos son algunas de las reformas con las que, a partir de la asunción del nuevo ministro de Seguridad, Luciano Anastasi, el Gobierno pretende optimizar el funcionamiento de la fuerza de seguridad. Anastasi manifestó ayer, en una entrevista con El Diario, que en el flamante ministerio (antes formaba parte de la cartera de Justicia, Gobierno y Culto) están trabajando en la reforma de la Ley Orgánica de la Policía para reorganizar y jerarquizar las fuerzas policiales existentes. “Queremos jerarquizar la Policía Científica, la de Medio Ambiente, la Turística. Nos parece importante que las fuerzas atiendan la problemática de la mujer y de género”, indicó como puntapié inicial de una serie de reestructuraciones que pondrán en marcha en su gestión.

 

—¿Cuáles son los cambios a los que apuntan?

 

—Hay muchos proyectos más en relación a la fuerza policial que es tamos pensando. Lo conversamos con ellos y estamos todos de acuerdo en que tenemos que hacerlo. Hay varios cambios que queremos llevar adelante.

 

 

 

Queremos una fuerza policial capacitada y entrenada para combatir el delito y para que nos sintamos seguros
 

 

Apuntamos a la modificación en el sistema de ascensos en relación a la capacitación de los uniformados. Queremos armar un plan de capacitación permanente por puntaje, de manera tal que el Ministerio de Seguridad desarrolle las necesidades curriculares obligatorias que la Policía necesita incorporar.

 

Al mismo tiempo y con base en un menú amplio, por puntaje, que cada policía de acuerdo a su perfil pueda elegir cómo sumar los puntos necesarios para los ascensos correspondientes.

 

Además queremos cambiar el horario de trabajo de la Policía. Hoy el uniformado trabaja 24 horas y descansa 48 horas y eso significa que las comisarías son hospedajes con cama y cocina. Hay una mala calidad de vida del policía.

 

La reforma nos permitiría limpiar las dependencias para transformarlas en oficinas administrativas, es decir ponerlas a disposición de la utilidad de las fuerzas.

 

 

 

Entrenamiento especializado

 

Sostuvo que otro de los temas a tratar es la implementación de un plan de ejercicios físicos obligatorios, dentro de la jornada de trabajo. “Estará destinado a policías de determinado rango y edad. Queremos verlos delgados, entrenados, y esto no solo incluiría ejercicio físico, sino también entrenamiento en artes marciales y técnicas de reducción, ya que son una herramienta de protección para aquellos que están en la línea de riesgo”, describió Anastasi.

 

—¿A qué apunta este proyecto de reorganización?

 

—Algo muy importante que quiero destacar que nosotros siempre decimos es que la Policía tiene que estar en la calle y la Policía está en la comisaría. Queremos cambiar eso y vemos prioritario lograr una policía ciudadana, de aproximación, que esté cerca de la gente.

 

El uniformado tiene que estar atento a todo lo que pasa en el barrio y es la persona que está además capacitada para atender no solo las problemáticas de seguridad, sino también aquellas típicas de la sociedad que tienen que ver con cuestiones de tercera edad o referentes a los niños.

 

Anastasi enfatizó la necesidad de volver al policía de barrio. “Nos hacía sentir seguros y que, además de tener entrenamiento especial para combatir el delito, tiene la suficiente capacidad física para cubrir las necesidades de la comunidad en la que vive”, dijo.

 

 

Discuten nuevo régimen horario

 

El régimen horario que aplican en la actualidad en la Policía “se explica, en el sector privado, cuando hay un trabajo en comisión, a la distancia”, señaló el ministro. “Por ejemplo —abundó—, un chofer de colectivos al que lo mandan a Buenos Aires se le paga mientras está manejando, pero también cuando está en el hotel descansando, porque está a disposición del empleador”.

 

Pero “en cualquier trabajo normal donde uno vive en las cercanías, el horario que mayor productividad le da al empleador y mejor calidad de vida le da al empleado es uno normal, de ocho horas de trabajo por dieciséis de descanso, con un franco y medio semanal, como en la mayoría de los trabajos”, dijo Anastasi, a propósito del nuevo régimen que debaten para aplicar a los integrantes de la fuerza de seguridad.

 

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