Transpuntano: siguen las asambleas y habría servicio reducido hasta el próximo martes

Tras toparse con la desagradable sorpresa de hallar depositado menos de la mitad de su sueldo de enero, los choferes de la empresa Transpuntano y los representantes del gremio de Unión Tranviarios Automotores (UTA) pasaron lunes y martes exigiendo una respuesta formal de la empresa. Pero lo que Carlos Ponce, presidente de la firma, dijo esta mañana en conferencia de prensa les gustó aún menos. El funcionario ratificó que la empresa no tiene fondos para abonar los sueldos adeudados y apuntó contra los trabajadores por perjudicar la recaudación con las asambleas que hacen desde hace dos días. Iván Piñeyro, secretario general de la delegación de UTA en San Luis, dijo que la protesta va a continuar hasta el martes y analizan realizar un paro total el miércoles 16.

La modalidad de protesta consiste en hacer “asambleas informativas” en las cabeceras de línea cuatro veces al día, en horarios pico: de 7 a 9, de 12 a 14, de 17 a 19 y de 21 a 23, lapsos en los que no salen colectivos a la calle.

Piñeyro aclaró que siempre queda una unidad cubriendo su respectivo recorrido y que en realidad no se trata de micro paros si no de una reducción del servicio.

“Estamos atados a la Ley y no podemos declararnos en huelga hasta pasados cinco días de asambleas, que se cumplen el martes. Ya el 16 estaríamos habilitados a hacer paro”, explicó en diálogo con El Diario.

“Hoy recibimos la notificación de que el Programa Relaciones Laborales de San Luis se declaró incompetente en el conflicto y le tiró la pelota al Ministerio de Trabajo de la Nación, donde mañana vamos a hacer las presentaciones correspondientes”, agregó.

“Estamos basados en el derecho a huelga y en el derecho a entablar comunicación con los compañeros, porque estas son asambleas informativas. Él lo menciona”, lanzó Piñeyro respecto a la acusación de Ponce, que en la conferencia de prensa los acusó de hacer paros encubiertos.

El presidente de Transpuntano también mencionó que el plan de la firma es pagar los sueldos adeudados (en algunos casos el 55% del total) con la recaudación de la venta de boletos, por lo que la reducción de servicio autoperjudicaría a los choferes. “Lo que quiere hacer es desviar el trasfondo del problema, que es que aún no pagó los sueldos. Hay casos en los que tampoco abonó las cargas sociales y las cuotas alimentarias de los compañeros que están separados. Y no sé si estarán pagos los seguros de los colectivos”, lanzó el gremialista.