Sempro: por mes reciben 450 llamadas que no son urgencias

Señalan que por día tienen hasta 160 solicitudes, de las cuales, 15 no corresponden a una emergencia.

El Servicio de Emergencias Médicas Provincial (Sempro) recibe por día hasta 160 llamadas, de las cuales, 15 no corresponden a verdaderas emergencias y suman unas 450 por mes. Así lo aseguró Soledad Quintero, médica coordinadora en la base de San Luis y en La Punta, quien hizo hincapié en la importancia de que la población tome conciencia y aporte datos claros al momento de contactarse con las operadoras.

El número al que los ciudadanos pueden recurrir en caso de urgencias es el 107. Además de exhortar para que terminen las llamadas falsas, en el Sempro trabajan constantemente para corroborar que los pedidos de emergencia estén justificados. "Contamos con un call center donde se hace la recepción. Las solicitudes se dividen en tres códigos: rojo, amarillo y verde. Si es el primero, tenemos un minuto y se debe actuar con la máxima celeridad porque está en riesgo la vida de una persona. Las situaciones en las que deberían pedir auxilio son, por ejemplo, cuando se produce un accidente cerebrovascular (ACV), caída de altura, accidente de tránsito, entre otras", manifestó la médica coordinadora. "Muchas veces nos llaman por una gastroenteritis o fiebre. En esos casos, pedimos que vayan hasta el centro de salud más cercano. De esta forma, evitamos el colapso de las líneas y podemos atender a alguien que realmente lo necesita", contó. 

También detalló que previamente realizan un "triaje" (clasificación, en francés) que se utiliza para seleccionar a los pacientes de acuerdo a la urgencia de la atención. "Se va catalogando la gravedad, si son más de dos personas involucradas en un accidente o si necesitamos el apoyo del móvil policial. Esto nos permite organizar los recursos existentes y las necesidades de los individuos", dijo Quintero.

Expresó que una vez definida la emergencia y el grado de afección, las operadoras se comunican con el centro de operación en donde se encuentran las ambulancias. "Trabajamos con prearribo. Esto quiere decir que mientras llega la ayuda al domicilio, se trata de tener una interlocución con el paciente para contenerlo y así mejorar la calidad de vida en caso de tener una supervivencia", precisó.

Las operadoras no solo toman las llamadas, sino que las discriminan y también se encargan de guiar al medio de movilidad para que la atención sea lo más rápida posible. "Tenemos un mapa digital que nos permite poder ayudar al chofer y así evitar que ingrese a calles muy transitadas", comentó la especialista. También destacó la necesidad de que los ciudadanos den datos precisos de sus domicilios y que por lo menos una persona espere fuera de la casa. Además, precisó que la mayor cantidad de accidentes se producen a fin de mes. "Coincide con la época de cobro. En general, son a la salida de los boliches, en donde los conductores de las motos van sin casco", aseguró Quintero.

Raúl Lopéz es chofer de la ambulancia del Sempro, y contó que trabaja en la unidad número nueve, ubicada en la Ediro. "Día a día llegamos a la base y nos preparamos para salir junto a mis compañeros. Cuando se nos solicita, tratamos de hacer todo lo más rápido posible para ayudar.  Somos una gran familia. Tenemos satisfacciones y, cuando no es así, tratamos de que no nos afecte en nuestra labor para seguir adelante", manifestó.

Quintero destacó que el Sempro cuenta con cuatro bases en Villa Mercedes, tres en San Luis, una en La Punta, una en Merlo y otra en Cortaderas. Asimismo, resaltó que todas tienen su propio radio de cobertura y que trabajan las 24 horas. "Cada una de las ambulancias están equipadas con todo lo necesario para actuar ante una situación determinada. El  equipo que trabaja día a día lo componen un médico,  un enfermero y personal competente para actuar ante una emergencia", precisó.

"Siempre le digo al equipo de trabajo que, cuando se suben a una ambulancia, piensen que es un Fórmula Uno. Ellos también dejan sus familias atrás y priorizan la vida de otro. La población, ante el sonido de la sirena, tiene que darle prioridad de paso y no todos lo hacen. Deberían pensar que la persona que va adentro puede ser un familiar de ellos", enfatizó la especialista.