Está libre el humorista más gracioso del país

Tras años de recorrer escenarios y espectáculos familiares con música y humor, el “Negro” Carlos Alberto Vidal se coronó en Córdoba campeón de la gran final del “Clú del Humor”, entre cinco comediantes.
Organizada por una productora cordobesa, la competencia fue televisada por Canal 10 -que realizó el casting nacional- en 5 minutos de su rutina graciosa. Vidal, que fue el único representante de San Luis y de la zona cuyana, esperó a que un jurado presidido por “Chichilo” Viale decidiera que él era el más gracioso. El premio fueron seis actuaciones en diferentes escenarios del país. Con un humor que mezcla lo ingenuo con lo picante, Vidal no hace uso de groserías: “No hago nada incorrecto porque toco y canto para todo el público”.
Se presentó sin su guitarra y las devoluciones de “Chichilo” fueron buenas, porque mezcló cuento corto con largo, en un repertorio para toda la familia. El dominio del escenario fue total y no tuvo corrección alguna.
A los 63 años (tiene más de 40 en la música y el humor), Carlos Vidal además es panadero en Santa Rosa del Conlara. En el barrio todos lo conocen y ahora su fama se extiende a otros terrenos, algo que quiere aprovechar. “Ahora que tengo la chapa de Nº 1 estoy a la espera de que me llamen”, comentó gracioso, sin perder el tiempo de este momento mediático para mantenerse en ese nivel prestigioso con producciones importantes.
Con su hermano, “El Gringo” Francisco, formó el dúo folclórico “Los Hermanos Vidal”. Grabaron tres cd y tienen un disco compacto grabado con chistes, todos de manera independiente. Para editar “De San Luis con humor”, aprovechó el premio que obtuvo en el año 2000 cuando llegó a la final del Show del Chiste en Showmatch (el ganador fue “Cacho” Garay). “En Córdoba me encontré con algunos de los que participaron aquella vez, pero me contaron que no tuvieron la oportunidad de volver a trabajar”, recordó Vidal. “Para mí está bueno eso, porque significa que el humor se renueva y ahora vienen los jóvenes a ocupar ese lugar”, explicó. En aquel momento participó del programa de tevé “Café Fashion” y abrió para “Los Cumpas”, además de varios encuentros folclóricos por el país.
Viajó solo a Córdoba, pero entre el público estaban Paola Sofía y Luciana Rosa, sus hijas que viven allá. Llegó el mismo día por la mañana, se hospedó en el hotel y de inmediato hizo contacto con los otros humoristas. “Estaban tranquilos y charlamos mucho”, dijo, “hasta que llegamos a concursar y ahí cambió: cuando un humorista está nervioso no le va bien”. Esa desventaja fue la oportunidad del “Negro” Vidal para hacer uso del escenario, como tantas veces.
Ahora está calmo pero ansía llevar el humor sanluiseño por el país, con su gracia especial y un talento pulido en años.