Movistar tiene en San Luis más de 100 mil clientes "activos", con una participación en el mercado de alrededor del 40 por ciento.
Ni tan simple, ni muy claro. Del otro lado de los anuncios por la llegada del 4G (una nueva generación que promete aumentar la velocidad para ver videos, descargar películas, etcétera), los más de 60 millones de usuarios de celulares -en todo el país- enfrentan una comunicación deficiente que no discrimina por modelo o provincia. Sin embargo, más allá de las llamadas caídas o las fallas en los equipos o en la propia facturación, el mercado de la telefonía móvil crece año tras año.
Como en gran parte de Argentina, San Luis sufre las limitaciones de las tres compañías (Claro, Movistar y Personal) que por falta de inversión en sus antenas, por ejemplo, lleva a los clientes a renegar con sus pequeños aparatos.
En una encuesta que realizó El Diario de la República, los vecinos de San Luis y Villa Mercedes, principalmente, explicaron que los problemas apuntan a los cortes en las llamadas, la mala conexión web y la sobrefacturación, entre otros comentarios.
Para la ex rectora de la Universidad de La Punta, Alicia Bañuelos, el problema en la telefonía celular responde a dos ejes.
“En primer lugar, la red está saturada porque la demanda del 3G superó la oferta estable de las empresas, que no invirtieron en las antenas, ni en San Luis ni en el país. Y en segundo lugar, hay un rol muy importante que juega el gobierno nacional, con las licitaciones para otorgar frecuencias, que es algo que criticaban las empresas”, señaló la especialista en tecnología, quien habló del fenómeno de la comunicación digital: “El mercado sigue en auge y va a seguir, tanto en el país como en todo el mundo. Porque la gente quiere cada vez más velocidad para conectarse y manejar todo desde cualquier punto, y no sólo desde la casa. La hiperconectividad es una realidad, y por eso las empresas piensan en servicios que permiten conectar desde personas hasta objetos, y esto requiere más ancho de banda. El problema es cuando esas opciones están para usarlas pero la infraestructura y la velocidad no te lo permiten. Entonces ahí tenés un usuario insatisfecho y vas en contra de la inclusión digital, de la que fue pionera San Luis con el gobierno de Alberto Rodríguez Saá”, dijo Bañuelos.
Del otro lado, las firmas no hablan de reclamos sino de “mejorar la calidad para los miles de usuarios”.
“La mayoría de los clientes en realidad están abocados al cambio de equipos, porque la tecnología y las redes, y la necesidad de estar conectados permanentemente, hacen que la gente busque equipos más evolucionados. Y después tenemos muchas consultas y casos por reposición por robos y roturas de terminales”, sorteó con habilidad el jefe operativo de Movistar, Daniel Suárez, y siguió respecto a la cobertura.
“En realidad tenemos una red sana, es decir, una red que está adecuada para la cantidad de usuarios que tenemos. Excepcionalmente hay lugares donde la velocidad del 3G puede ser mayor a menor. Obviamente que si me paro en la esquina de la peatonal Rivadavia y Belgrano, a las 11, voy a tener cerca de 4 mil personas usando la antena y no va a ser la misma potencia que a 10 cuadras de distancia (en el microcentro tienen 5 antenas). Pero igual, no llegamos al colapso, sino que baja la intensidad”, aseguró Suárez.
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