El papá de Amancay: "Nosotros no pedimos justicia, la exigimos"

Una veintena de personas participó este viernes de una pintada sobre la avenida Santos Ortiz, a 300 metros del viaducto del Portezuelo, en el lugar exacto en el que murió Rocío Amancay Pedernera, la joven de 20 años a la que atropelló un conductor ebrio. “Nosotros no pedimos justicia, la exigimos. Buscamos una condena ejemplar, que no sea un homicidio culposo”, dijo Martín Pedernera, papá de la víctima.

A las 17 horas la pintura amarilla ya había fraguado y la estrella que indica que en ese lugar hubo un “hecho de tránsito” ya se mostraba como un hito. El nombre de la víctima rodeó esa figura.

La convocatoria estaba prevista para las 15. Minutos antes llegaron los padres de Amancay, Martín y Gabriela, quienes junto a integrantes de la Asociación Civil Madres del Dolor y a personal de la Policía Caminera diagramaron un operativo de tránsito.

La Policía dejó libre media calzada desde el puente de calle Riobamba para permitir el paso de camiones y vehículos oficiales, a 700 metros del lugar en donde los padres de Amancay indicaron como el punto justo en donde la moto azul, en que la joven volvía del trabajo a su casa, fue arrollada por la camioneta Toyota Hilux que conducía Jonathan Sandoval, quien continúa detenido.

Los minutos corrían y cada vez más personas llegaron a mostrar su apoyo a la familia para visibilizar el reclamo de justicia. “Madres del dolor es una asociación que lleva esta campaña de estrellas amarillas a nivel nacional. Esto no es un homenaje, esto es visibilizar que aquí hubo un hecho de tránsito. Cuando se maneja alcoholizado, con imprudencia y se mata a una persona, eso no es un accidente”, dijo Daniela Cabrera, vicepresidenta de la asociación.

“Nuestra asociación es de acompañamiento, de madres que desde el dolor deciden luchar. Por eso le pedimos Gabriela, mamá de Amancay, que sea la que comience a pintar la estrella”. Gabriela agarró el pincel empapado en pintura amarilla, se acuclilló y trazó la primera pincelada. Le siguieron el hermano de la joven, Facundo, su tía María, familiares y amigos. Por último, Martín, el padre, terminó de rellenar la figura.

La estrella amarilla se coloca en las rutas y calles de la Argentina como emblema de atención y memoria de las víctimas fatales de siniestros viales. Se instala en los lugares donde ocurrió el hecho que provocó una o varias muertes.

“Estamos unidos como familia y exigimos que haya justicia”, reafirmó Pedernera. “Ahora le pedimos el apoyo a la sociedad para que podamos llevar adelante el juicio de la mejor manera. Necesitamos pagar los peritos y abogados para que la verdad se sepa. Por eso hicimos una rifa con un bono de 500 pesos”, explicó. Para colaborar se puede hacer un giro vía Mercado Pago con el alias: amancay.pedernera.mp.

Al terminar el grupo emprendió una marcha hasta la rotonda ubicada detrás del supermercado ChangoMâs. “Esto cada vez daña más. Quiero lograr justicia, es mi meta en la vida. Estamos unidos para hacer justicia por Amancay”, cerró.

A menos de un mes del hecho

Amancay fue arrollada el 29 de julio alrededor de las 4 de la mañana. Salió de trabajar y nunca llegó a su casa. Sandoval, quien permanece con prisión preventiva desde el 12 de agosto, escapó de la escena y se puso a disposición de la justicia un día después. Quedó detenido y el fiscal Esteban Roche le formuló cargos por “homicidio simple con dolo eventual”, una figura penal más grave que la utilizada en accidentes de tránsito ya que, según su hipótesis, el conductor debió figurarse el peligro que representaba para terceros conduciendo en el estado en que lo hizo.

Luego de que el juez de Garantías 3, Ariel Parrillis, le dictara la preventiva, la querella logró agregar más testimonios a la causa. Además, presentaron peritos accidentológicos y forenses. “Estamos muy cerca de que el caso sea cerrado y de poder probar que el señor Sandoval mató a Amancay Pedernera”, mencionó ayer Guillermo Sánchez Pagano, representante del padre de la joven.