Declararía hoy la joven abusada y apuñalada 43 veces por un compañero

El fiscal de Instrucción 3 busca cerrar la investigación y elevar a juicio la causa de Facundo Britez, acusado de haber apuñalado 43 veces y abusado sexualmente a una compañera de colegio en un baldío del barrio Cerro de la Cruz de la capital. Pero falta una prueba central: la declaración de la víctima, que sufrió, sufre y aún vive en un profundo shock por lo que ocurrió y no pudo ser entrevistada antes. Finalmente, hablaría este viernes, ante una junta interdisciplinaria conformada especialmente para su testimonio.

"En algún momento buscamos que ella declarara por medio de Cámara Gesell debido al trauma que aún tiene, pero al debatirlo con la querella decidimos que lo mejor es que se le haga una junta interdisciplinaria, que se trata básicamente de un informe psicológico en donde ella relatará lo que le pasó a un profesional y este hará un informe correspondiente", le dijo el fiscal de Instrucción 3, Esteban Roche, a El Diario.

El funcionario judicial adelantó que será la última pericia que introducirán al expediente con el objetivo de dar clausura a la etapa probatoria y realizar la elevación a juicio, que en principio sería bajó la acusación de "Abuso sexual con acceso carnal agravado por el daño a la salud de la víctima en concurso real con tentativa de femicidio”.

El abogado Federico Putelli, quien representa a la familia de la víctima, aseguró que la joven aún padece secuelas de lo sucedido y que transita "un estrés postraumático". Este medio pudo saber que en las últimas horas la licenciada Rocío Barrera, quien realizó un seguimiento de la joven desde que ocurrió el hecho, dio cuenta ante la fiscalía que la chica presentó ataques de pánico e incluso dejó de cursar el nivel secundario por esos problemas. A su vez, habría dado a entender que la adolescente tendría "una leve incapacidad cognitiva", aunque no pudo certificarlo.

Además de querer su testimonio sobre qué pasó la tarde del 24 de octubre del año pasado, el fiscal y las partes también buscarán hoy determinar el perfil psicológico de la damnificada. "Se puede llegar a entender que tenga una incapacidad cognitiva, pero es muy chica para lo que es el entendimiento del hecho. Ella está muy shockeada con lo que pasó", sostuvo Putelli, y opinó que la severidad del caso y los detalles que pueda dar quedan en un plano secundario respecto a su salud. 

Premeditación

El 27 de octubre, tres días después del hecho, Britez, que tenía 18 años, fue conducido a una audiencia de formulación de cargos. En esa ocasión, Virginia Palacios, representante de la Unidad Fiscal, sostuvo que el ataque "no fue casual, ya existía una relación".

La teoría del caso del Ministerio Pública Fiscal es que antes del brutal ataque, que ocurrió en un terreno en la esquina de Balde y Los Puquios, hubo una fuerte discusión entre los jóvenes y que Britez empezó a golpear a la joven a puñetazos. "Como no le fue suficiente la abusó y le asestó cuarenta y tres puñaladas que fueron constatadas por la médica forense Marcela Gómez, y que se distribuyeron en el cuero cabelludo (4), la frente (4), el rostro (7), en el maxilar inferior (4), en la parte posterior del cuello (2), en el tórax (12), en el antebrazo izquierdo (3) y en la zona lumbar (7)", narró Palacios.

Lejos de asistirla, Britez huyó hacia a su vivienda, situada a una cuadra y media de la escena, y en el camino le manifestó a una vecina que "venía de matar a una amiga". Al llegar a su casa, desesperado y ensangrentado, el acusado se bañó, aunque no se percató de que las manchas hemáticas quedaron impregnadas en la cortina de la ducha.

Con el fin de eliminar evidencia, se dirigió a la parte trasera de la vivienda e incendió su remera y el pantalón que llevaba durante el ataque. "Todo fue secuestrado durante el allanamiento. Una de las prendas se encontraba casi en su totalidad quemada y la otra tenía aún manchas de sangre", sostuvo la fiscal en la acusación.

Putelli comentó ahora que "el hecho está sumamente probado", manifestó estar "satisfecho con las medidas que tomó la fiscalía" y concordó en que hubo "una situación premeditada por cómo y dónde se dio". "Que uno pueda llegar a tener una discapacidad a nivel cognitivo no escapa de la responsabilidad en cuanto al hecho y su premeditación", opinó acorde a los planteos de la defensa del joven, que dan a entender que "podría padecer dilemas psiquiátricos".

Sigue detenido

La primera vez que se sentó ante los fiscales y el juez de Garantías 2, Ariel Parrillis, Britez no declaró. Su defensa solicitó 8 días de prórroga de la detención y estuvo alojado en una comisaría de la capital hasta el 3 de noviembre, cuando el magistrado finalmente ordenó encarcelarlo como pidieron Roche y Palacios.

Pero esa medida coercitiva vence el próximo 24 de abril, aunque una de las fuentes consultadas adelantó que extenderán su encarcelación hasta la llegada del debate oral.

Putelli reprodujo las palabras de la madre de la víctima, quien dejó claro que "buscan justicia, ya que les han hecho mucho daño como familia". "Ese es el pedido que siempre nos hacen a nosotros que somos los abogados. Ellos tienen temor y quieren que se mantenga la prisión preventiva. El miedo es que él salga y se lo encuentren nuevamente".

Guillermo Sánchez Pagano, abogado defensor del imputado, habló con El Diario y comentó que su pupilo no conlleva el encierro de la mejor manera y comentó que también sufre un estado de shock por lo ocurrido.

Redacción / NTV