Buscan registrar sitios de riqueza paleontológica y arqueológica

La historia del mundo se esconde en cada rincón de la tierra. Y en el territorio puntano abundan los espacios que guardan valiosos datos del pasado. La misión que se planteó un grupo de profesionales de la Universidad Nacional de San Luis (UNSL), es preservar estos lugares. Para ello, crearon un proyecto para hacer un relevamiento de los sitios que tienen riqueza paleontológica y arqueológica. 

“La universidad hace casi 20 años que realiza distintos tipos de estudios en sitios fosilíferos de la provincia. Hay zonas muy importantes que contienen fósiles de distintas edades, como Bajo de Veliz y Sierra de las Quijadas, que son los más conocidos a nivel nacional e incluso internacional. Nosotros somos un grupo de biólogos y geólogos que hace un par de décadas hacemos trabajos de investigación científica y lo que nos viene pasando es que trabajamos en forma separada. En los últimos años, se sumaron en San Luis algunos arqueólogos que han estado en la Gruta de Inti Huasi, lugares con sitios rupestres, investigadores del Conicet, becarios posdoctorales que han hecho tesis, paleontólogos, etcétera. Este equipo fue creciendo y nos dimos cuenta que tenemos intereses en común, sobre todo en la conservación de sitios”, explicó la bióloga Andrea Arcucci en diálogo con El Diario de la República.

De acuerdo a lo que explicitó, normalmente la gente piensa que el objetivo de los profesionales es el estudio de fósiles o restos arqueológicos, pero además de ello las funciones están atravesadas por la responsabilidad del cuidado. Nada se agota con lo que se pueda sacar. Los sectores de estudio siguen conteniendo materiales importantes y no solo se abordan fósiles, sino también el lugar donde están enterrados, la manera en que están, todo contiene mucha información. De ahí la necesidad de cuidar los restos.

Algunos lugares tienen una protección legal, otros están en campos privados. El grupo de trabajo resolvió asociarse para hacer el proyecto de relevamiento y contribuir a las futuras generaciones con la conservación. Para ello, recurrieron a profesionales que trabajan con imágenes satelitales. La idea es desarrollar una suerte de mapa digital, donde puedan ubicar los lugares para que se tomen decisiones al respecto.

“Para cuidar lo que es nuestro, hay que conocerlo. La idea es tratar de conocer, difundir y valorar lo que tenemos en la provincia, que es mucho, y tratar de concientizar. El patrimonio es muy valioso, hay que tomar decisiones equilibradas y cuidar los sitios para que nos puedan dar sus frutos a lo largo de muchas generaciones. Creemos que —como agentes públicos— los docentes universitarios podemos aportar el grano de arena”, manifestó.

“Este proyecto es interdisciplinario y tiene la intención de recopilar y sistematizar la información publicada y, además, tener un registro de los espacios que hay en la provincia, con una intención de manejar mejor la protección. En la medida que sepamos dónde están, se podrán tomar mejores decisiones. No está en nuestras manos ejecutar acciones, pero sí promover la información que necesiten los organismos estatales en su momento”, añadió.

Sobre la propuesta

En principio, el proyecto se presentó a la UNSL, que otorgó una primera financiación. Se estima que tenga una duración de cuatro años, es decir, se trata de un abordaje a mediano plazo. En la primera etapa, se hará la recopilación de lo ya publicado. Más adelante, harán salidas de campo para chequear dónde están los lugares y en qué estado se encuentran, además de ejecutar una evaluación de los sitios, cómo es su acceso y cuál es el estado. Todo se desplegará en distintas etapas.

Al mismo tiempo, se están presentando a financiaciones de fundaciones privadas. No es un proyecto muy caro, pero requiere de estas ayudas económicas. Biólogos, paleontólogos, geólogos y arqueólogos, harán todo el aporte intelectual y de acción.

“Estamos en la parte inicial. Las personas que nos asociamos teníamos cada uno un poco de información, resolvimos juntarnos porque nos dimos cuenta que no tenía sentido que cada uno tuviera esa información por separado. Lo mejor era integrarla, por eso la necesidad de hacerlo interdisciplinario. Somos un grupo bastante grande, hay gente de la provincia, tenemos el asesoramiento de colegas españoles que han trabajado mucho sobre este tema de patrimonio. En España tienen una historia muy larga en protección de sitios, todas estas cosas en otros lugares configuran un atractivo turístico también. De hecho, uno de los objetivos de la protección es conservar los sitios lo mejor posible para que sean disfrutados por las futuras generaciones”, subrayó.