Unas ochenta personas aguardan una cirugía para bajar de peso

El hambre es más que ansiedad, es una necesidad fisiológica de comer y lleva a darte cuenta, de un cachetazo, que uno tiene una adicción. Que no está bien comer de la forma que antes lo hacíamos, comenzar a ponderar la cantidad de alimentos que ingeríamos y reflexionar cómo mi cuerpo podía procesar todo eso”. Este es el testimonio de Matías, de 41 años, quien desde hace cinco convive día a día con la superación física y mental tras haberse sometido a un by pass gástrico. El Hospital San Luis cuenta desde hace un año con el Servicio de Tratamiento de la Obesidad y el Metabolismo. Allí han atendido alrededor de 120 consultas y unos 80 pacientes son casos que encuadran para una cirugía bariátrica.

El equipo del Hospital San Luis está conformado por dos médicos cirujanos, una médica clínica, dos psicólogos y cuatro nutricionistas. Brinda asistencia interdisciplinar para personas que sufren obesidad y que hoy en día pueden contar con apoyo profesional para llevar adelante una cirugía o un tratamiento metabólico.

“Cuando comenzamos con el consultorio pensamos que la solución era la cirugía bariátrica, pero hubo mucha gente que por complicaciones asociadas a la obesidad no aplicaba a la operación. Por eso armamos un proyecto que funciona hace casi un año y sumamos la parte metabólica, creando esta área integral de ayuda y contención para los pacientes que tienen obesidad y necesitan mejorar su calidad de vida”, indicó el coordinador del servicio, Raúl Coria.

Frenados por la pandemia

“La idea inicial era que en junio de este año comenzáramos con las cirugías, pero la pandemia no lo permitió. Hemos atendido alrededor de 120 consultas desde el año pasado hasta marzo, y aproximadamente 80 personas aplican para realizarse la operación bariátrica”, expresó. El proceso de consulta incluye entrevistas con el plantel de profesionales para poder llevar adelante el pre y postratamiento para el descenso de peso. “A los pacientes los recibimos y les hacemos una evaluación integral. Luego, con el plantel médico analizamos qué es lo mejor para cada caso y, si la persona no tiene contraindicación para la operación, la incorporamos al programa”, manifestó el cirujano.

Como una forma de acercamiento a los pacientes en época de pandemia, el equipo del Servicio de Tratamiento inició un recorrido por el interior provincial, que debido al retroceso a Fase 1 solo pudo abarcar consultas de 18 personas en la localidad de Concarán. 

A partir del cambio del estatus sanitario en la provincia, reactivarán las consultas en diversas localidades a fin de brindar asesoramiento a aquellas personas que necesiten preguntar e iniciar un tratamiento médico para un cambio radical de vida.