Locura en Zagreb por la clasificación a la final

Lágrimas y gritos de alegría, abrazos y cánticos, petardos y bengalas: Croacia se desmelenó la noche del miércoles después de su histórica victoria en la Copa del Mundo contra Inglaterra, que depara una final contra Francia, la primera para los balcánicos.

"¡Croacia es una final de la Copa del Mundo! ¡Es tan hermoso! ¡Milagro de todos los milagros en Rusia!" gritó extasiado el comentarista de televisión HRT estatal, Drago Cosic, cuando el partido terminó.

Croacia venció a Inglaterra por 2-1 gracias a un gol de Mario Mandzukic en el segundo período de tiempo extra.

Miles de aficionados que se congregaron en la zona de aficionados más grande del país en la plaza principal de Zagreb desafiaron la lluvia ocasional para animar al equipo apodado Vatreni, mientras veían el juego en una pantalla gigante.

"No tenemos intención de parar ahora", dijo el entrenador Zlatko Dalic a HRT, poco después del partido.

 El talentoso Luka Modric y compañía han sido agasajado como héroes nacionales por su clasificación hasta semifinales en Rusia, donde repitieron la hazaña de 1998, en la primera Copa del mundo disputada por el país como una nación independiente.

Pero este miércoles, el cuadro de Dalic lo hizo aún mejor con la clasificación a su primera final de un Mundial para este país de unos cuatro millones de habitantes.

NA