Buscan multar a quienes digan piropos en la calle

“Hola, mi amor” es quizás el más leve de los piropos a los que las mujeres deben someterse al salir a las calles puntanas. Es por esto que el concejal del Frente para la Victoria, Germán Ponce, presentó un proyecto de ordenanza, que ayer comenzó a discutirse en el Concejo Deliberante y que prevé, entre otras medidas, multas para quienes emitan improperios o acosen de cualquier forma a las mujeres en la vía pública.

El hijo del intendente Enrique Ponce, en diálogo con El Diario de la República, indicó que el proyecto juntó más de 5 mil firmas de adhesión y que incluiría además de las multas, campañas de concientización sobre violencia de género en la vía pública como en obras en construcción, kioskos y paradas de colectivos.

“Primero hay que tener en cuenta qué es el acoso callejero”, aclaró el edil. Esto no sólo incluiría el típico piropo, sino que toda “práctica de connotación sexual ejercida por una persona en espacios públicos”, es decir “silbidos, besos, bocinazos, jadeos y ruidos, comentarios sexuales indirectos o directos al cuerpo, tocaciones, persecución y arrinconamiento”, dijo el concejal, que se basó en la definición del Observatorio en contra del Acoso Callejero.

“Hay estadísticas que indican que ocho de cada diez mujeres sufren acoso callejero y a partir de los 12 años, más del 90% fue alguna vez víctima de acoso”, agregó Ponce, quien remarcó que no busca que su proyecto sea “ni machista ni feminista, sino fomentar el respeto entre los ciudadanos”.

El concejal tomó en cuenta otras ciudades donde ya se establecieron ordenanzas como en Buenos Aires. “En algunos lugares las multas van hasta los mil pesos”, ejemplificó. “Otro tema es evitar que esto se vuelva una ordenanza feminista o machista o que haya falsas denuncias o distorsiones. Hay que ver bien cómo acreditar que una chica sufrió esa situación, pero tampoco caer en no creerle a la víctima”, detalló. Sobre esto manifestó que entre las opciones está el uso de testigos que acrediten el acoso, obviamente con el derecho a defensa para el supuesto acosador.

Ponce dijo que próximamente sumarán más gente en el debate “sin importar el género o identidad de la persona, para tener una discusión más amplia con los sectores involucrados”, entre los que se incluiría a las organizaciones feministas y la Dirección Municipal de la Mujer.

La ordenanza no podría ser más oportuna. La semana pasada, la Cámara de Diputados de la Nación dio media sanción para tipificar como delito al acoso callejero. De hecho, los ediles aguardan la definición que tendrá la Cámara de Senadores, para ver si continuará como proyecto de ordenanza que establezca multas o como un proyecto amplio de declaración, que incluya las acciones para concientizar sobre el acoso callejero.

"Es una realidad que se ha invisibilizado en el tiempo. Hay muchas mujeres que tienen que modificar sus recorridos diarios, su vestimenta, debido a este acoso callejero que se realiza cotidianamente en las calles de la ciudad. Es una problemática que estamos viendo a nivel nacional y como en San Luis también ocurre, es hora de que empecemos a trabajar", concluyó.

El acoso callejero en el país

La diputada nacional por la provincia de Buenos Aires, Diana Conti, del Frente para la Victoria, logró la semana pasada que su proyecto para incorporar el acoso callejero como delito a la Ley de Protección Integral a las Mujeres obtuviera media sanción.

La ley, que será tratada esta semana en la Cámara de Senadores, incluye además que la problemática se incorpore a la currícula mínima de las escuelas  e insta a que las fuerzas de seguridad actúen si están en presencia de acoso. Además contempla la creación de una  línea telefónica gratuita para contención a las víctimas.

Existen otros antecedentes legislativos. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se sancionó en diciembre del año pasado la ley Nº 5742, que tiene por objeto prevenir el acoso callejero y sancionar a los acosadores. Y ya existió un primer caso: Lucía Cabrera denunció a un taxista por perseguirla en la calle. Hubo audiencias de mediación y el chofer debió hacer un curso "de convivencia, diversidad y derechos humanos". Además en esa jurisdicción crearon el Observatorio contra el Acoso, cuyos miembros buscan que tenga un alcance nacional.

Otras campanas también han visibilizado el acoso callejero. Una de las más importantes es Acción Respeto, una página de Facebook, que recopila testimonios y tiene 176 mil seguidores.