Para sumar provincias a un paro general, Micheli pasó por San Luis

En medio de la crisis económica nacional, los tarifazos y un mes cargado de protestas, el secretario general de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) Autónoma, Pablo Micheli pasó por San Luis para avanzar en el armado de un paro que busca ser masivo. Si bien no tienen una fecha definida, esperan poder convocar a las filiales de todo el país además de otras organizaciones sociales.

“Nuestra central viene empujando a través de mis declaraciones y comunicados, porque entendemos que no hay más tiempo que demorar en la convocatoria de un paro nacional. Este Gobierno dilata para favorecer la problemática de los trabajadores, los jubilados y los sectores más afectados por los ajustes entre los cuales está el tarifazo descomunal que descargaron sobre la espalda de millones de argentinos el tema de los salarios bajos, la precariedad laboral y un costo de vida que aumenta sistemáticamente”, dijo Micheli y apuntó: “Con todo esto, Macri busca flexibilizar aún más el mercado laboral generando un atractivo para las inversiones extranjeras, haciéndonos pagar con pérdidas de conquistas, rebajas salariales, pérdida de condiciones laborales, etcétera", afirmó el sindicalista.

Por otro lado, el referente de la CTA en la provincia, Diego Costa explicó que la idea de la visita era realizar un plenario para discutir la situación que atraviesa San Luis en materia de empleo.

“En particular, los gremios de nuestra central realizaron fuertes medidas desde el inicio del gobierno de Macri, cuando iniciaron con los despidos del sector del Estado, y después también por las paritarias y distintas reivindicaciones. También se hicieron protestas individuales de nuestras entidades, como ATE, Conadu histórica, etcétera. Pero ahora falta la coordinación con el resto, para que sea global”, manifestó Costa.

En este sentido, Micheli encabezó reuniones en distintos puntos del país, para así consensuar algunos puntos de lucha, juntar y formalizar el apoyo del resto de las delegaciones.

“Hace dos semanas estuvimos con un plenario regional en San Juan; hace un mes, en el Litoral; hace 40 días en el NOA; ahora la semana que viene vamos a la Patagonia. Es decir, estamos discutiendo con todos los delegados la construcción de este paro general. Podrá ser en una semana, a fines de agosto, a principios de setiembre; pero indudablemente lo vamos hacer. Lo ideal sería uno de 36 horas con movilización a Plaza de Mayo y todas las capitales de las provincias. Pero por ahora demos gracias que podamos concretar en unidad de acción uno por 24 horas, porque construir la unidad en Argentina, que ni siquiera es permanente, sino circunstancial, por un momento determinado, ya igual es una tarea difícil”, explicó el representante nacional de la CTA Autónoma, quien contó que en distintas oportunidades tuvo  contacto con el senador Adolfo Rodríguez Saá, cuando fueron a buscar apoyo por temas relacionados a las luchas sindicales.

Entre números y despidos

Según las cifras que salieron de los propios estudios de la CTA, en los últimos 6 meses se produjeron más de 170 mil despidos en el sector privado, un número que también describiría las bajas en la esfera pública.

Para el miembro de la central y director del Instituto de Estudios y Formación (IEF), Julio Gambina, uno de los mayores errores de la gestión macrista es impulsar una política deliberada que articula la recesión productiva con la inflación.

“El sector agrario, que fue uno de los que más aplaudió a Macri, salió muy favorecido por la devaluación y la quita de retenciones. Pero el propio Ministerio de Trabajo indicó que pese a que la macroeconomía de los sectores más concentrados del agro anda bien, igual se perdieron más de 10 mil puestos en el campo”, aseveró y concluyó: “El Indec acaba de publicar las estadísticas de junio, que señalan que la actividad industrial, comparado con junio del año pasado, bajó un 6%, lo que significa que la producción bajó, lo que significa que hubo más desempleo y suspensiones”, lamentó Gambina, mientras que Micheli continuó: “No es casusal que baje tanto el consumo en los supermercados o en el resto de las cadenas alimentarias. Pasa que la gente no tiene ni plata para comprar comida, porque no tiene trabajo. Esta situación muestra la realidad que vivimos en Argentina”.