Un grupo de jóvenes cordobeses desarrolló una innovadora aplicación que ayuda a personas con discapacidades como la parálisis cerebral, la afasia o el autismo a mejorar su comunicación. El “OTTAA Project” es gratuito y está disponible en la tienda PlayStore para los dispositivos Android. Pero el proyecto, que fue reconocido a nivel mundial (ver "De las 6 mejores"), no tiene el financiamiento de parte del gobierno nacional y provincial de Córdoba para seguir activo. Por eso los emprendedores visitaron San Luis en búsqueda de apoyo para mantenerlo a flote.
“Tuve que hacer 400 kilómetros a San Luis para poder reunirme con alguien que nos escuche. El intendente Ponce dijo que nos iba dar una mano. En San Luis se ve que se le da prioridad al ciudadano que necesita un apoyo extra por la discapacidad”, dijo Carlos Costa, el joven de 24 años, creador de la app.
Apesadumbrado, así se siente Costa al no conseguir el financiamiento y el apoyo que requiere para que su aplicación llegue a los 460 mil argentinos discapacitados que lo necesitan. Sin embargo, en cuanto la provincia se enteró de “OTTAA Project”, convocó a su desarrollador para una charla. “Fue un evento espectacular, porque pude contar con público de distintas áreas, y eso va a generar un impacto multiplicador para que llegue a las personas que les haga falta”, declaró y reveló: “Se habló con la Municipalidad de hacer un proyecto en conjunto, lo cual nos parece fantástico. Yo soy de Carlos Paz, ahí viví hasta los 22 años, y no tuve la oportunidad de reunirme con el intendente de mi ciudad”.
Costa, licenciado en Comunicación Institucional, aseguró que en San Luis hay 6.200 personas con discapacidad y que la aplicación ya está disponible para ayudarlos. “Actualmente, la gente con esa condición, se comunica con un cuaderno impreso de pictogramas, que son imágenes que representan objetos o acciones. Lo que hace “OTTAA Project” es nutrir un algoritmo predictivo con las distintas informaciones que recopilen los sensores del dispositivo. Es decir que tiene en cuenta la hora del día, la ubicación o el clima, para que la persona pueda comunicarse de una manera más sencilla y accesible”, explicó.
Con una interfaz muy simple, la pantalla inicial de “OTTAA Project” tiene 4 opciones para iniciar una frase: “Hola”, “Tengo/quiero/estoy”, “Familia”, y “Responder”. Empezando la frase por cualquiera de éstas, cambiarán automáticamente los pictogramas, por otras 4 alternativas. Incluso una vez finalizada la frase, la aplicación permite reproducirla. Actualmente tienen 1.100 usuarios activos en Argentina y en países vecinos de habla hispana. También la app se puede descargar en inglés.
“Esto es un proyecto que nació con la idea hace dos años, y está disponible para descargar hace ocho meses. Surge porque junto con mi hermano nos encontramos con la discapacidad en la familia. Mi abuelo tenía alzheimer, que paulatinamente le afectaba la capacidad de comunicarse. Entonces empezamos a buscar soluciones e intentamos desarrollar un software con la base inicial y universal de comunicación que son los pictogramas”, recordó Carlos.
Sobre la aplicación en sí, el joven cordobés detalló que es gratuita y así permanecerá, aunque en algunos días sacarán una nueva versión paga, actualizada y con más funcionalidades. Además, otro de los aspectos interesantes es la conexión con otras aplicaciones. “También le pusimos una integración con otras app como Facebook y Whatsapp, para que la persona pueda comunicarse con gente que no está en su entorno en ese momento, compartiendo la frase que construyó”.
Jorge Álvarez, médico cardiólogo, ni bien se enteró de la aplicación, se comunicó instantáneamente con Carlos para que venga a exponer en San Luis. “Esto hay que difundirlo, porque no tiene techo. No soy un experto en el área, pero tengo pacientes que son familiares de discapacitados y sé la angustia que genera el no poder comunicarse. Que un hijo a la mañana te diga te quiero, quiero la leche, es algo increíble. ¿Esto no merece tener un apoyo para que llegue a quien tenga que llegar? La pregunta está hecha, hay que recoger el guante y solucionar el problema”, opinó.
En cuanto a los objetivos que se plantean sus creadores, hay de corto y largo plazo. Aseguran que el más inmediato es lograr el financiamiento para que el proyecto no se caiga, y el otro es trabajar en conjunto con el gobierno nacional para que la aplicación beneficie a todos los argentinos que lo necesiten. “Es una sensación increíble para los padres saber de antemano qué necesita su hijo, cuando antes no lo podía expresar. El afecto de ellos para con nosotros es la energía que nos hace seguir con esto a pesar de las adversidades. Yo siento que estoy contribuyendo a que la gente no pase lo que yo pasé, me siento bien yo mismo, sabiendo que ayudo a otros”, cerró Carlos emocionado.


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