Apicultura: le espera un 2016 muy movido

La apicultura argentina está en un momento complicado, con bajos precios internacionales, sobreoferta de miel de países productores centrales y dificultades internas producto de la inflación y los altos costos de la actividad. Por eso era importante para San Luis participar de la primera reunión del año del Consejo Nacional Apícola, que se llevó a cabo en Buenos Aires con la conducción de Néstor Roulet, secretario de Agregado de Valor del Ministerio de Agroindustria, y Mercedes Nimo, quien comanda la Subsecretaría de Alimentos y Bebidas. Por la provincia participaron Juan Manuel Preti Celi, jefe del Subprograma Producción Pecuaria, y Agustín Martínez, jefe del área Desarrollo Productivo del Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción. También estuvo Mauricio Rabinovich, el titular del programa apícola de la Dirección Nacional de Sanidad Animal del Senasa.

Cada provincia tuvo la oportunidad de plantear su realidad y exponer posibles soluciones, amén de los tradicionales reclamos que vienen arrastrando desde hace años y que ahora, ante el cambio de gobierno y sobre todo de actitud de los funcionarios, sienten que es el momento de empezar a corregir algunas distorsiones. Al menos como para empezar a vislumbrar un futuro mejor, fue bueno observar la excelente convocatoria que tuvo el encuentro y que destacó Roulet. Además, hubo protagonistas de toda la cadena de producción apícola, lo que es otro detalle a destacar porque un negocio es tal cuando beneficia a todos los involucrados.

Nimo abrió la jornada con la presentación de un informe actualizado de la situación de la apicultura en el país, poniendo énfasis en que la campaña 2015-16 se cosechó entre 65 y 70 mil toneladas de miel. También recalcó la importancia del ordenamiento de toda la cadena a través de un sistema de trazabilidad confiable. Por eso uno de los responsables técnicos del área, hizo un repaso sobre el sistema de Renapa On Line, que en breve reemplazará al Renspa que otorga el Senasa.

En este punto, Martínez pidió la palabra y se refirió a que en San Luis desde hace más de dos años se utiliza un sistema de inscripción de Renapa On Line, que ha sido de mucha utilidad para registrar productores informales, haciéndolos beneficiarios del plan sanitario apícola provincial con gran éxito. Por eso el funcionario puntano ofreció la experiencia surgida de estos años de utilización para mejorar la aplicación del sistema nacional y sugirió que lo antes posible se unifique el doble registro (Renapa-Renspa) para una mayor comodidad de los productores.

Otro tema que es de vital importancia para San Luis es el de la radicación de apiarios en zonas de control de la plaga de la langosta, una cuestión que forma parte del Plan Nacional de Sanidad Apícola (PNSA). Es sabido que el año pasado hubo un brote muy peligroso en algunos campos de Córdoba cercanos al límite, y que la provincia está trabajando fuertemente en el monitoreo de la langosta para evitar que se propague y arruine vastas zonas productivas locales.

Siguiendo con la sanidad, se estableció que dentro del plan de acción para 2016 el Senasa deberá fijar a la brevedad el momento de los muestreos y la cantidad de casos testigo para cada provincia en el estudio de la Varroa. Se definieron los niveles de prevalencia post tratamiento para varroa en cada una de ellas y se destacó que San Luis y La Rioja son las únicas que vienen aplicando un plan sanitario consensuado en el Consejo Apícola Provincial.

En las mesas de debate se discutió la metodología a seguir para el traslado de colmenas entre provincias de diferentes niveles de prevalencia de la enfermedad y llegaron a la conclusión que el ingreso será con el nivel de prevalencia de la zona receptora. En cuanto a Nosemosis, ante la falta de productos aprobados por el Senasa para su combate, saldrá un pedido de la Comisión Nacional de Sanidad a los laboratorios privados para que revean la factibilidad de comercializar sus productos a nivel nacional, lo que ahora no sucede porque toda la existencia es exportada.

Otra preocupación es un pequeño escarabajo que viene avanzando desde el sur de Brasil y que ya es una plaga ubicada a 700 kilómetros del territorio argentino. La comisión sanitaria, como medida preventiva, elaborará una cartilla con fotos y características, más teléfonos de contacto para realizar denuncias ante la aparición de este insecto. Todas las provincias contarán con esta cartilla para su difusión.

Cuando abordaron el tema de las salas de extracción, diferentes provincias plantearon la necesidad de disponer de ellas y aumentar su número, a lo que los funcionarios nacionales contestaron que las podrán solicitar al Ministerio, pero resguardando la institucionalidad de los consejos provinciales ante cada pedido, para mantener el orden y la equidad en los reclamos.

Ya más en confianza, los productores se fueron abriendo en sus comentarios y dejaron reflejado el desánimo que domina al sector apícola, motivado por la incertidumbre en cuanto al futuro y los bajos precios de la miel, que en algunas provincias incluso hace peligrar la actividad. “Muchos contaron que trabajan con rentabilidad negativa y pidieron que el Estado nacional se involucre más en la conformación de las cotizaciones, dejando en un segundo plano las salas de extracción, porque si siguen a pérdida no van a hacer falta”, contó Martínez.

Las autoridades dijeron lo que ya todos sabían: que los precios bajos se deben a la sobreoferta de miel que hay en el mercado internacional. “La única esperanza es que como la cosecha de Estados Unidos no fue muy buena y falta miel allí, es posible que suba el valor del producto argentino”, completó el funcionario puntano.