Los consumidores de San Luis tendrán una mayor facilidad para hacer sus reclamos ante un producto defectuoso o un servicio que no cumplió con las expectativas. El Subprograma de Defensa del Consumidor volvió a su hogar tras un lustro en Terrazas del Portezuelo: ahora las oficinas están ubicadas en el tercer piso de Ayacucho 945, en la vieja Casa de Gobierno. El titular del área, Alberto Montiel Diaz, dijo que con el cambio proyectan duplicar la recepción de denuncias.
Las flamantes oficinas están bien señalizadas, con enormes carteles y flechas indicativas. La delegación está abierta de lunes a viernes de 8 a 14. "Realizamos la mudanza para que la gente tenga mejor acceso y pueda hacer sus trámites más rápido. Había puntanos que necesitaban tomar dos colectivos para ir allá. Al final de mi anterior gestión, estábamos en el centro, pero cuando nos cambiamos, las diligencias cayeron más de la mitad. Después subieron lentamente”, afirmó Montiel Díaz. El funcionario consideró que los reclamos podrían incluso llegar a triplicarse en relación a los que recibían en Terrazas.
El funcionario señaló que mucha gente ya va a asesorarse a la sede de Ayacucho. “Antes no sucedía porque les quedaba lejos. Son preguntas para ver que tienen que hacer por algún inconveniente particular o cómo evitarlo”.
Para poder asentar una queja formal en el Subprograma, el consumidor debe llenar un formulario, que le entregan en las mismas oficinas. Una vez realizada esa tarea, es necesario conseguir una fotocopia documental respaldatoria referida al reclamo, ya sea la factura de compra de un producto, o el recibo del servicio técnico en caso de que se trate de un artículo reparado. “Es muy importante este paso”, explicó Montiel Diaz.
Luego de esta etapa comienza el proceso de conciliación, donde se fija una fecha para celebrar una audiencia entre quien reclama y a quien acusa. La idea es que en esta instancia pueda alcanzarse un acuerdo. Si esto no es posible, comienza una causa y, de constatarse una infracción a la ley, puede aplicarse una sanción. Montiel Díaz dijo que en la mayoría de los casos se llega a un arreglo entre las partes. Para todos los pasos la asistencia es gratuita y el ciudadano no necesita contar con el asesoramiento de un abogado.
En la filial de la ciudad de San Luis de Defensa del Consumidor hay unas veinticinco personas en el plantel: desde los oficinistas hasta los profesionales que prestan asistencia. Además el Subprograma cuenta con dos delegaciones en las ciudades más importantes: Villa Mercedes y Merlo.
El funcionario dijo que entre los reclamos más frecuentes en Defensa del Consumidor están los problemas con la telefonía celular (conexión y pago de servicios), y productos defectuosos que estaban en garantía, pero en donde no se pudo concretar un cambio o devolución con los propietarios del comercio. Un poco más lejos se encuentran las quejas vinculadas a la atención y a los servicios bancarios.


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