"Las mujeres que buscan ayuda en nuestro programa están en una situación de riesgo social".
Durante el año pasado 152 mujeres solicitaron atención en los distintos programas del Ministerio de Inclusión y mayor cantidad fue por denuncias de violencia física y psicológica. En el 65 por ciento de ese total estaban en convivencia con sus parejas y el rango etario que más ayuda pidió se ubicó entre los 30 y los 41 años. Estos datos fueron relevados por el Programa Desarrollo y Protección Social que elaboró un trabajo de relevamiento de nuevos casos de mujeres que fueron atendidas en 2014 y que derivaron en 111 denuncias judiciales por violencia física, psicológica, sexual y económica.
Rosario Bragagnolo se desempeña hace tres años en la jefatura de ese Programa y detalló que “la mayoría de los casos, el 59 por ciento, nos fueron derivados por los Juzgados de Familia, pero unas 28 mujeres llegaron por iniciativa propia”. La funcionaria analizó que “por la tarea que desempeñamos puedo decir que las mujeres que acuden a nuestro Programa en busca de ayuda están en situación de violencia y riesgo social porque tienen un estado de vulnerabilidad histórica en sus familias que se reproduce generacionalmente”.
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