Docentes y padres de los alumnos de la Escuela Técnica Nº 6 “General San Martín” (Agraria) piden conocer el impacto ambiental de la futura planta de efluentes cloacales que el Municipio construye a escasos 100 metros de ese establecimiento. La vicedirectora, Claudia Barroso, dijo que “a todos nos preocupa que tengamos esta planta en frente y tan cerca del predio de la escuela, teniendo en cuenta la contaminación que puede emanar de allí. No sabemos nada de esa obra, ni conocemos los detalles de los pliegos de la licitación”.
El reclamo de la comunidad educativa es para “preservar la seguridad, la salud y la integridad física de los alumnos y docentes. Porque desde el momento en que ahí habrá residuos cloacales, la contaminación será inevitable. Y el desmonte y lo que eso acarrea, también es perjudicial. Sobre todo en esta escuela donde le enseñamos a los chicos a cuidar la tierra y el medio ambiente y resulta que a pocos metros talan los árboles”, señaló Barroso.
Además, los docentes plantearon sus dudas en un comunicado de prensa: quieren conocer si hubo un estudio de impacto ambiental, por qué eligieron ese lugar sin ser consultados y si ese predio está dentro del ejido de la Municipalidad de San Luis, porque según explicaron, “las cartas que llegan acá están identificadas como localidad de Pescadores”.
La Agraria forma a 250 alumnos en una superficie de 72 hectáreas y cuenta con alrededor de 100 animales entre ganado bovino, caprino, porcino, aves, conejos y panales de abejas, además de tener viveros y huertas. Allí funciona la fábrica de chacinados, otra de dulces y el matadero provincial que ahora está concesionado a un privado. También hay un laboratorio y el taller de apicultura.
Otro punto que piden aclarar es quién dio la factibilidad para la nueva planta, qué empresa ganó la licitación para construirla y en cuánto tiempo está previsto que sea terminada. “A mí me parece que los efluentes cloacales van a perjudicar a la comunidad educativa. Yo entiendo que debemos velar por los intereses de la mayoría, pero creo que había otros terrenos donde instalarla. Es verdad que hablo desde mi ignorancia y a lo mejor éste sea el lugar adecuado. Pero lo que pedimos es que nos den la seguridad de que esta obra no será perjudicial para los alumnos, animales y las plantaciones”, pidió la docente.
Ayer, en el predio municipal, había una máquina especial que limpiaba el terreno de malezas y cuatro personas que manipulaban aparatos de mensura, y a simple vista se ven montañas con ramas y árboles que fueron arrancados de raíz. “Lo que hemos constatado es un desmonte muy importante, pero fuera de eso no tenemos la menor idea de qué están haciendo en ese lugar. Lo que pretendemos es establecer alguna reunión con las autoridades y los profesores para manifestarles esta inquietud. No nos interesa hacer de esto un hecho político, ni mucho menos, a pesar de que le cursamos un pedido de audiencia al intendente Ponce para pedirle si es posible que se instale en otro lugar”, señaló Barroso. También confirmó que el 10 de diciembre de 2014, además de dejarla en el Municipio, la misma nota se la envió a Estela Curti, supervisora General; al jefe del Programa Escuela Técnica Profesional y de Oficios, Matías Follari (ahora está a cargo Federico Villegas Elorza) y al jefe del Programa Biodiversidad, Jorge Heider. “Hasta el momento no hemos tenido ninguna respuesta de parte de ellos”, dijo y aclaró que “como directiva de la escuela no me compete trabajar en este tema, pero no me queda otra porque estoy preocupada, como el resto de los docentes, alumnos y también a sus padres”.
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