“Fue un trabajo hormiga”, opinó el subjefe de la Comisaría de Santa Rosa del Conlara. Y es que Marcelo Roberto Colombo se enteró que le habían robado cuando ya le faltaban 16 vacas, hecho que el puestero de su campo notó recién la semana pasada. Como en la zona se conocen todos, un amigo del criador descubrió tres de sus animales en una estancia de la zona y se lo comentó. Lo que siguió fue una denuncia policial, un allanamiento y tres detenidos acusados de “Hurto calificado de ganado mayor – abigeato”.
Todo comenzó hace unos diez días, cuando el cierre perimetral de la estancia “El Mate”, ubicada a la vera de la Autopista de Los Comechingones, comenzó a romperse misteriosamente. El hombre que cuida la propiedad notó el faltante de 16 vacas de raza criolla, todas adultas y de más de 250 kilos, luego de arreglar varias veces el alambrado del sector sur del campo.
Días después Colombo recibió el llamado de “una persona de Santa Rosa que también cría animales y que fue a comprar vacas a una estancia de Concarán”, contó el subcomisario Carlos Pereyra, de la Comisaría de Distrito 25ª. “Ese hombre se dio cuenta de que tres bovinos tenían la marca de la estancia de Colombo”, dijo.
La víctima del robo radicó la denuncia por el robo el jueves 5 de marzo y el domingo siguiente un grupo de policías al mando del comisario inspector Carlos Ortiz allanó una estancia en el paraje Santa Martina, propiedad de Adolfo Andrada.
Efectivamente había tres vacas de Colombo. Andrada dijo que habían sido guardadas allí por dos de sus hijos, así que los tres marcharon presos. Tras la declaración indagatoria a los acusados, sólo Gustavo Andrada quedó detenido, “ya que al parecer dijo que su padre y su hermano no tenían nada que ver”, informó Pereyra.
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