Calle Angosta, tres décadas de canto

Cerca de la una de la mañana, cuando Algarroba.com deslumbraba con su espectáculo, Julio Salazar, el cantante del conjunto, invitó a subir al escenario a Raúl Ávila. El “Sapo” con sus 81 años es “uno de los cuyanos más queridos y su voz es casi parte del paisaje”, según resumió el propio Salazar. Juntos le pusieron voz a la “Zamba mercedina”, una canción que culminó con una ovación del público de pie y con los dos cantores estrechados en un emotivo abrazo. 

En ese gesto puede resumirse la primera noche de la edición número 30 de la Fiesta de la Calle Angosta. La jornada inaugural unió la historia con el presente, y el recuerdo de los que con sus guitarras gestaron la cultura musical de la ciudad le abrió los brazos a las nuevas generaciones que reavivan esas canciones con su empuje.
El encuentro que José Zavala soñó en 1984 cumple treinta años de vida. El aniversario ameritaba un festejo a la altura de los deseos de Zavalita y el programa de artistas que abrieron la edición no decepcionó. La apertura oficial llegó a las diez de la noche con una mini obra del Teatro Comunitario (Ver pág. 25) y enseguida el ballet "Razas de mi pueblo" se lució con varios cuadros de danzas. 
Esta vez la conducción estuvo a cargo del locutor Jorge Darío Bence. El sanjuanino cuenta con un gran trayectoria como divulgador del folclore cuyano e incluso había estado al frente de los micrófonos la Calle Angosta en 1989. A Bence lo acompañaron los locales Walter Medina y Silvana Arias. 

Los presentadores dieron paso a cada uno de los músicos que inundaron de cuecas, tonadas y gatos al “Alfonso y Zavala”. Los grupos familiares Los Guzmán y Los Hermanos Mercau representaron sobre las tablas a la gran corriente de conjuntos mercedinos, mientras que desde provincias vecinas llegaron Los Patricios (Córdoba) y Raíces Nuevas (Mendoza). 

Los que no podían faltar fueron los históricos "Indios Tacunau", que desparramaron toda su experiencia en festivales del país y el mundo. También fueron ellos los que aportaron esa cuota de tradición que muchos buscan en el evento, al interpretar clásicos del repertorio argentino y finalizar con la “Marcha de San Lorenzo”, cantada con los espectadores.

Pero sin duda, los platos fuertes de la noche fueron las actuaciones de Algarroba.com y Los Tekis. Primero, la banda puntana hizo levantar a la gente de sus butacas con su propuesta innovadora en música cuyana. A las guitarras, el bajo y la batería, le sumaron un trío de instrumentos de vientos (que en realidad habían estrenado el año pasado) con el que conforman un sonido propio y potente. Las vibraciones aún resonaban en el predio cuando Los Tekis aparecieron con sus trajes coloridos, sus quenas, flautas y sikus y transformaron la Calle Angosta en un carnaval. 

“Es un placer llegar a esta cuna de guitarreros y tonadas y les agradecemos por habernos dejado traer nuestra cultura de Jujuy para celebrarla con ustedes”, dijo Mauro Colleti, una de las caras del grupo. Los jujeños también forman parte de esa generación que apostó a hacer un nuevo folclore y se animaron a mezclarlo con el rock nacional. 

Desde las dos de la mañana y durante más de una hora y media, colmaron el predio con una catarata de canciones que los mercedinos tomaron como propias. Lluvias de papelitos y guerras de harina fueron el saldo de una jornada en la que la mística de la calle de una vereda sola brilló una vez más, como hace treinta años.