El sol, que asomó de a ratos durante la mañana, brilló con tibieza en la tarde del miércoles. San Luis se sumó a la marcha, que reunió a las damas en ciudades de toda la Argentina, para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer.
Murga, baile y batucada acompañaron al grupo de chicas, mujeres, niñas y hombres que se concentraron en la plaza Pringles a las 17. Antes de caminar por las calles del microcentro repartieron folletos, pintaron carteles y desplegaron banderas que ilustraban la causa.
En la capital, la actividad estuvo organizada por grupos feministas no partidarios, una aclaración que las ONG quisieron destacar.
Ningunas Santas, Casa Refugio, Psicólogos sin Fronteras, Socorristas en Red, Mujeres Autoconvocadas de El Volcán, Mumalá, Colectivo de Mujeres por un parto respetado, Somos Libres, ADEM, ADU; Mujeres rompiendo esquemas, construyendo realidades y hasta las Madres del Dolor desandaron el camino desde la calle Junín. La marcha siguió por Rivadavia, tuvo una parada especial frente al Poder Judicial, para retomar por 25 de Mayo y doblar en San Martín. En los últimos metros recorrieron Illia y finalmente retornaron por Junín.
Hubo grupos alegres, enérgicos y efusivos, otros silenciosos y reflexivos. Los hombres también se sumaron a la causa: en pareja, con amigos y hasta con sus hijos. Fotos en pancartas y folletos recordaron algunos casos que aún no están resueltos. Una bandera blanca con letras azules y rojas clamó contra el abuso infantil. A todos los unió una sola consigna: basta de violencia contra la mujer.
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