Francisco Delgado pasó por San Luis

Una costumbre que no perdió el ganador de "Gran hermano" Francisco Delgado es la de viajar. Por eso disfruta de las visitas que hace a las provincias donde lo llaman para hacer las famosas "presencias".
Apenas ingresó al hotel donde se hospedó en San Luis el fin de semana, se le acercó una chica que hacía guardia en la puerta para sacarse una foto, saludarlo y contarle que votó por él.  Fran le firmó una revista con una nota suya y dijo que toma con naturalidad el avance de las chicas de la calle. 
"Ya estaba acostumbrado al contacto, a diferencia de los otros chicos que estuvieron en la casa. Siento que algo hice bien en esos cinco meses de encierro y que la gente se sintió identificada con mis historias”, dijo. 
 

"A la televisión le hace falta un chico común, un pibe del interior"

Fran supone que le llegó a la audiencia porque es un tipo simple. “Entiendo que la gente se identifique con un rockero, un artista o un pintor pero yo soy un pibe común y en la tele falta un chico común. Hay buenos conductores y panelistas y músicos pero falta un pibe del interior”.
Las historias que puede contar Francisco son de viajes, de historias con sus amigos y de su romance furtivo con Gisela Bernal.
Proveniente de una familia de profesionales, de padre médico y madre abogada, un hermano escritor y una hermana fiscal, el ganador del reality es profesor de educación física y se dice la oveja negra. “Yo rompí el molde, decidí irme de viajes, fui el que no quiso seguir el prototipo de familia”, agregó pese a que se describió como “un hijo bastante tranqui, que no les traje problemas a mis viejos".
A los 21 años, Delgado se fue de mochilero a Cuba con un amigo y se dio cuenta que su vida pasaba por viajar. 
Tres años después llegó al programa “Aventura paraíso”, a través de su agencia de castings, hasta que a alguien su cara le pareció atractiva y le pidieron un piloto para un programa de viajes.  “El acento argentino garpa en todo el mundo”, dijo con autoridad ya que trabajó en Suecia, Helsinski y Barcelona.
Este viajero incansable trabajó en Perú y Ecuador durante tres años, fue a Chile dos veces en bicicleta y tiene otros destinos planificados en su futuro. De San Luis dijo que quería conocer La Quebrada de los Cóndores y que visitó mucho Merlo.
Al medio, parece que Delgado llegó para quedarse. Actualmente es panelista en “Infama” y tiene un programa de radio de música electrónica. Hará teatro en la calle Corrientes con el reestreno de “El champán las pone mimosas”, junto a Tristán, Jey Mammon, Belén Francese y Matías Schrank, su principal competidor en Gran Hermano.
El verdadero cambio se dio en su vida cuando le ofrecieron un rol para una comedia de enredos sentimentales basada en su vida. Delgado es padre de Elena con Barby Silenzi y de Ian con Gisela Bernal, a quienes ve todos los días, y siente que le cambiaron la vida. 
“Aprendí que la fama es puro cuento, porque hay famosos que no tienen para pagar las expensas, viven de apariencias, y hay otros que no se muestran y viven muy bien”, dijo el joven que se declaró fanático de Pink Floyd. 
Una de las cosas que le dio la fama fue asistir al cumpleaños de Charly García y compartir mesa con Juanse, el Zorrito Quintiero y Sebastián Ortega. “Me invitó Mercedes, la novia, que veía Gran Hermano con Charly al lado”. Hincha de River y amigo de los caballos, cuenta que en el palco presidencial de la cancha de River Plate, se le acercó Adolfito Cambiasso a sacarse una foto. "Era al revés: yo quería una foto con él".