Nosotros somos República

Los medios de España y del mundo mostraron cómo en 135 ciudades de ese país sucedieron “colectivos sociales”, es decir masivas manifestaciones para reclamar un referéndum sobre el modelo de Estado.
Argentina es un estado, la Nación se organiza sobre la forma representativa, republicana y federal, como lo reza el Artículo 1 de la Constitución Argentina. El modelo de Estado en España se organiza bajo la forma de Monarquía Parlamentaria.
Con la abdicación inesperada del rey, quedó de manifiesto lo que es la era digital. Antes, las noticias tardaban en llegar y en interpretarse, ahora no. Abdicó el rey, la gente lo interpretó en dos minutos y salió a la calle en 135 ciudades. En Madrid se hablaba de 50 mil personas en Puerta del Sol, y en Barcelona 10 mil.
Algunas de las consignas eran: “España, mañana será republicana”; “Los Borbones, a las elecciones”; “Transición real sin rey”; “No hay dos sin tres, República otra vez”; “Que viva la lucha de la clase trabajadora”; “Los Borbones a los tiburones”.
En 1812, en la época del rey Fernando VII y cuando Napoleón había invadido España, se dictó la Constitución de Cádiz y se decidió la forma republicana e inclusive intentaron que las colonias tuvieran representantes en la Corte Española. La segunda república fue la que generó la Guerra Civil, por eso: “No hay dos sin tres, República otra vez”.
El derecho constitucional español es el más nuevo del mundo, la Constitución española es la más nueva, tiene unos 35 años. La Constitución argentina viene del siglo XIX y en el año 1930 Uruguay cumplió los cien años de su Constitución. La Constitución española establece la forma de monarquía parlamentaria, donde el rey cumple una cuestión formal en el poder, aunque muy importante para ellos, porque dicen que él garantiza la unidad nacional, que no haya desbordes y contiene al pueblo. Pero esa teoría es una antigüedad, una postura cultural que genera los nacionalismos y que no son buenas, sobre todo en una Europa que busca el mercado común y la globalización.
Los españoles piden que se pueda votar la Jefatura del Estado y también una propuesta de ley para que todos los cargos públicos y representativos sean designados mediante elección de los ciudadanos, de manera directa o a través de sus representantes. Si se discute la monarquía, por “sí” o por “no”, se la podría sacar y hacer un régimen constitucional parlamentario. Es sacar un capítulo a la Constitución y no pasará nada, una modificación simplísima.
Lo que no está agregado en su cultura, es que no es necesaria una figura como el monarca para generar la unidad nacional o contener a todos. La Constitución respetada contiene a todos y es la figura de unidad nacional, que está expresa generalmente en un preámbulo, donde se dicen los fines del Estado, hacia dónde vamos y los vínculos que tenemos. Nosotros hemos tenido muchísimas y tremendas dificultades con esto, pero también hemos pasado de la Constitución a tener dictaduras y así nos ha ido...
Los países vascos también se están manifestando, los eusqueras incluso llamaron a movilizarse en sus capitales bajo el lema: “Independencia por la República”.
Las cosas pasan así de rápido en la era de la globalización. Antes, un paradigma tardaba veinte años para cambiar. Hoy, un paradigma cambia en dos años. Si la idea está en la cabeza, en dos años se da vuelta. Y se dice que en 2020, los paradigmas cambiarán en dos días. No sé si no estamos adelantándonos a los tiempos, porque en España, si siguen así, quizás terminan cambiando el paradigma en dos días. En 24 horas está la discusión instalada en todo el país. Ahora hay que resolver qué día coronarán, con una ceremonia pomposa, fuera de lugar, a Felipe, el nuevo rey. Ese día habrá seguramente una movilización social, porque el problema está instalado. Está rebalsando los partidos políticos, que en su momento fueron poder y tuvieron que ir a dar la mano y besar el anillo del rey.
El artículo 57 de la Constitución española establece una línea sucesoria, no es que el rey designa a su sucesor, sino que lo designa la Constitución. Es un manotazo real de Juan Carlos, que no está en condiciones. Él abdicó y la Constitución se encarga del sucesor, no es que abdicó a favor del hijo.
Sucede que la realeza Borbónica se cree dueña de Europa y ahí está el problema. El rey Juan Carlos no puede hablar, cuando sucedió el golpe de Antonio Tejero estuvo muy bien, aunque algunos consideraban que él estaba involucrado, se abrió a tiempo y quedó bien parado. Ayudó a la Constitución, ayudó a la Moncloa, a la unidad de los españoles y al periodo de bonanza de España. Pero es ahora un momento de crisis en España, de huelgas, con la gente en la calle, los “indignados”. Cuando vieron que el rey caminaba con dificultad y descubrieron que estuvo cazando elefantes en África, le recordó a todos los españoles los abusos que tuvieron los reyes en todas las monarquías. Y se le sumaron los casos de corrupción en los que está involucrada su hija.
Hay publicidades en donde se dice que Felipe tiene gran amistad con Sudamérica. ¿De dónde sacan eso? Sudamérica tiene aberración por el tema real, no admite otra forma que la República. En Argentina, cuando algún prócer ha pensado una cosa distinta, lo bajaban del pedestal de prócer. Nosotros somos República.
La primera República de la era moderna se llamó: América. Estados Unidos de Norteamérica y su Constitución. Y después todos los pueblos americanos. No somos monarquía. Cuando Felipe vino a la Argentina, por respeto al hijo de un jefe de Estado, a un representante, lo respetamos, pero no quiere decir que le hayamos rendido pleitesía a un rey o un príncipe.
Nosotros somos República.
Hoy están protestando en 135 ciudades de España diciendo que se revise, o se mire, el tema de la monarquía parlamentaria. No queremos la monarquía de un rey cazando elefantes.